Hace varias semanas venimos adviertiendo en esta misma columna que, al menos en la ciudad de La Plata la elección no solo esta definida, sino que la única posibilidad de cambio que se presenta en el horizonte es que el oficialismo local amplie la ventaja sobre el Frente de Todos, en lo que podría ser la peor elección del peronismo en muchísimo tiempo.
Esa realidad llevó al intendente Julio Garro, principal artífice del triunfo en la capital provincial, a proyectar nuevos escenarios, teniendo en cuenta que ya no tiene posibilidades de una nueva reelección, pero además que los números de las PASO lo convirtieron claramente en una referencia provincial para todo el PRO.
Incluso esta semana el jefe comunal se animó a dar muestras de independencia en el armado provincial, algo que hasta el momento no había ocurrido, cuando recibió a José Ferro, primer candidato a concejal de Juntos en Chivilcoy, que se convierte asi en el primer "garrista" fuera de los límites de la ciudad.
Pero además ya miran hacia calle 12 con mucha simpatía los Libertarios que tiene en La Plata a Carolina Píparo como principal referente y que ya avizoran un futuro muy cercano al PRO, más de la mano de Javier Milei que del bonaerense José Luis Espert, que aún mantiene ciertos reparos para acercarse a los "Halcones" del macrismo.
Algo similar ocurre con el peronismo ni kirchnerista todavía enrolado en las filas del randazzismo, que ya profundiza los vínculos a través de Fabián Lugli y Marcelo "chubyto" Leguizamon, dos funcionarios de la primera línea que prometen dar pelea por la sucesión, pero siempre dentro de Juntos.
Es poco entonces lo que le queda por hacer al Frente de Todos, que para colmo de males esta sufriendo en casi todos los distritos una fuerte fuga de votos por izquierda, lo que en la capital provincial podría determinar que se produzca una verdadera debacle a nivel del Concejo Deliberante, ya que si el FIT finalmente supera el piso, pero no se mueven demasiado los porcentajes de las dos fuerzas principales, el reparto quedaría en 6 concejales para Juntos, 4 para el FdT y 2 para la izquierda.
Pero si, como se espera en el oficialismo, la diferencia se amplia y adempas el FIT ingresa al concejo, el reparto podría ser 7 para el oficialismo, 3 para el kirchnerismo y 2 para la izquierda, lo que pondría en aprietos todo proyecto a futuro del peronismo platense.
Los intentos del ex juez Luis Arias, de explicar los números de las PASO a través de la baja participación o los cambios de lugar de votación por el desdoblamiento de las mesas por la pandemia no convencen a nadie y son más bien al antesala de una derrota que podría ser la más dura del peronismo desde la vuelta a la democracia.
Además en el tramo central de la boleta están garantizados por dos lugar que ocupan Ariel Archanco y Lucía Iañez, que por ese motivo no están demasiado dispuestos a inmolarse en un escenario tan adverso, algo similar a lo que ocurre con Guillermo Escudero que ocupa el tercer lugar de la lista de concejales y que con su lugar asegurado aprovecha cada minuto para posicionarse de cara al futuro.
En el frente interno Garro también lográ contener a la tropa, en este caso porque aparece con firmeza por primera vez un norte posible con armado bonaerense propio de cara al 2023, que podría terminar en una candidatura o en la potencialidad de una lugar en un eventual gabinete nacional y provincial, es decir que reaparecen las expectativas para todos los integrantes del equipo municipal, no porque no las tuvieran, sino porque hasta ahora las posibilidades eran difusas.
