En la UCR cada cual atiende su juego, el panperonismo debate liderazgos y los libertarios negocian con el PRO
En el complejo mapa de la política de la Octava Sección electoral se presenta un escenario con el oficialismo intentando amalgamar las diferencias internas bajo el ala del intendente Julio Alak y la oposición a Unión por la Patria (UxP) dispersa en varias facciones, sobre todo en el Concejo Deliberante platense, que sesionó la semana pasada en un plenario que no fue más que un trámite exprés.
La UCR, fiel a su tradición internista, le hace honor a la teoría de las eternas grietas puertas adentro. En el cuerpo deliberativo los “boinas blancas” al menos lograron formar un bloque junto a un sector minoritario del PRO disidente rompiendo con Juntos por el Cambio. Pero el verdadero tironeo entre dirigentes del centenario partido se da de cara a los cargos partidarios.
La Plata es una ciudad de tradición radical, aunque el partido fundado por Leandro Nicéforo Alem no gobierna la capital provincial desde que en 1991 Alak rompió la seguidilla de los dos mandatos pos retorno de la democracia. Desde 1983 a 1987 gobernó Juan Carlos Alberti y lo sucedió Pablo Pinto.
La disputa interna por el manejo del partido -hoy la Junta Central está en manos de Pablo Nicoletti- se empieza a rosquear en los comités de barrio. El escenario, no obstante, también se da en las universidades, donde el centenario partido tiene mucho apoyo militante. Franja Morada es la histórica agrupación que aglutina a los cuadros de “la cantera” radical.
Nunca se sabe, pero se calcula que para noviembre se celebrarían las internas para renovar autoridades partidarias y La Plata cobra especial relevancia por su importancia de poder elegir directamente cargos destacados como convencionales nacionales y provinciales, además de delegados al Comité Provincia.
Además de presidente de la Junta Central, -que tuvo el año pasado chispazos con la gestión del ex intendente Julio Garro-, Nicoletti es flamante prosecretario en la Cámara de Diputados, avalado por la corriente “Evolución” que lideran el economista Martín Lousteau a nivel nacional y el diputado bonaerense Pablo Domenichini en Provincia.
Si logra que se repita la alianza que lo catapultó a la cúspide partidaria, Nicoletti confía en repetir mandato. Para ello deberá contar nuevamente con el apoyo de la Corriente de Opinión Nacional (CON) que tiene como máxima referente a la vicepresidente partidaria Luciana Bártoli y como secretario a Leandro Bazze, hijo del histórico dirigente Miguel Bazze.
También hay un dato no menor para analizar en este esquema y es hipotetizar cómo jugará el ex concejal y referente en la región oeste (sección séptima), Guillermo Duva, que en las internas del 2022 apoyó al diputado provincial y ex edil Claudio Frangul, miembro de la denominada “banda de los Turcos”.
Esto provocó que el legislador, ante la falta de apoyo de la sección que aporta un 28 por ciento del padrón, desistiera de competir por el puesto que ocupó entre 2016 y 2020.
Frangul está más empoderado y cambió su actitud con Duva, al punto que la correlación de fuerzas podría encaminar el rumbo del “Turco”: cambiar lo suficiente como para “barajar y dar de nuevo”. En buen romance, volver al sillón más codiciado o ser el que ostente la lapicera para designar al futuro presidente.
En este rompecabezas difícil de armar no debería ignorarse a otro miembro de los “turcos”, Raúl Cadáa, delegado directo del actual titular del Comité Provincial Maximiliano Abad. Abad lo reconoció simbólica y materialmente con otro cargo de funcionario para la Cámara baja. Cadáa -fue funcionario de Garro- conformaba con Frangul, con el recientemente fallecido y ex consejero escolar, Eduardo Kechichián y Raúl y Luis Abraham el grupo mencionado, que comandó la pata radical que hizo posible el triunfo de Garro.
Pero el grupo se dispersó y perdió peso y sólo se dedicaron a retener algún poder parcial, como es la quinta sección -correspondiente a Los Hornos y Villa Elvira- de la mano de los Abraham, en sociedad con Sergio Panella, el empresario de la electrónica dueño de 12 Visión y el dirigente radical que más elecciones perdió entre internas, legislativas y precandidaturas a intendente en toda la historia de la ciudad.
También quiere intervenir Ignacio Gando -“el mago”-, quien tuvo un fugaz paso como concejal para reemplazar al edil del PRO Juan Martínez Garmendia cuando este fue funcionario. Gando también es hijo del ex concejal Fernando Gando, quien ocupó la banca entre 2011 y 2015 y es un cuadro querido en el ambiente.
Ignacio ató algunos vínculos en su momento con Duva y aspira a ser contenido en el espacio que ahora tendría a Frangul como máximo referente. Muchos correligionarios señalan que podría ser el “muleto” en el caso que el legislador provincial desista de competir, lo que hoy es un ejercicio de adivinación.
Lo cierto es que podría concretarse un enfrentamiento formal desde lo partidario pero que viene de lejos por la rosca interna. Tanto Nicoletti como Frangul mantienen distancia desde hace un tiempo. Caminaron juntos, eso sí, en las internas del año 2013 y en las recientes del 2022. No obstante, y aun ubicándose en una lista contra “lamparita” Panella, el diálogo entre ellos nunca fue el ideal.
En la baldosa rota del radicalismo platense también hay figuras que, incluso dedicados a sus actividades privadas y profesionales, supieron tener influencia. Son los casos del ex concejal Marcelo Viñes y del ex titular de la Junta Central Marcelo Uriarte -un prestigioso cardiólogo-. Uriarte goza del respeto general de los correligionarios, pero sobre todo del experimentado Federico Storani, quien lo elogió sin rodeos el año pasado en medio de la interna de Juntos por el Cambio: “Para mí es un gran ejemplo y ojalá se animara; nosotros lo respaldaríamos”, dijo “Freddy”, quien fuera ladero del ex presidente Raúl Alfonsín.
Peronismo para armar
Como lo describió NOVA en varias entregas, a UxP lo mantiene “unido” el liderazgo de Julio Alak y la cruzada anti libertaria pero el espacio presenta fisuras internas típicas de un armado que tuvo que dibujarse a fuerza de entendimientos, negociaciones y cesión de espacios de poder entre el alakismo puro, el camporismo, el sindicalismo y otros sectores del peronismo como el bruerismo y agrupaciones afines a Cristina Fernández de Kirchner como Kolina, que tiene como referente a Gastón Castagneto, actual funcionario de Alak.
Según le confió a este portal un armador alakista que camina los pasillos y tiene llegada a varios despachos de la planta baja del Palacio municipal, habría recelos internos entre parte del núcleo duro del cristinismo y el alakismo de paladar negro, que tiene a varios referentes en el Ejecutivo y también en el CD.
“El Turco ve todo pero interviene a su modo, por goteo, como buen equilibrista del poder que es”, definió la situación la fuente en cuestión. “El problema es el de siempre: guerra de egos y el manejo discrecional de las `cajas¨. En este esquema también tiene relativo juego propio el bruerismo, que pudo colar en el organigrama municipal al ex precandidato a intendente Guillermo Escudero como secretario de Ambiente.
El ex edil es el nombre que representa a los Bruera, quienes después de la trágica inundación del 2013 y de la causa de las coimas en el marco de las zonificaciones del Pro.Cre.Ar, no pudieron colar el apellido en ninguna lista. Este medio reflejó hace dos semanas la reaparición pública de Mariano y Gabriel Bruera.
Fue en el marco de un plenario encabezado por el propio Alak, quien compartió el encuentro con el denominado “Frente SI”. Además de los hermanos menores del ex intendente Pablo Bruera participaron el ex edil Oscar Vaudagna, Gastón Harispe (Oktubres) y Esteban Concia, entre otros dirigentes de menor peso político.
Convivencia por conveniencia
Cuando se conoció la nueva composición del Concejo platense, tras las elecciones generales de octubre pasado, todo parecía indicar que iba a haber en el recinto un bloque opositor con los libertarios, el radicalismo y el garrismo.
La utopía duró poco y tras arduas negociaciones por la elección de las autoridades del cuerpo deliberativo, la idea se desvaneció y Garro sufrió la fuga del radicalismo -que quedó con un bloque comandado por el ex diputado provincial Diego Rovella y un sector minoritario del PRO-.
LLA hizo lo propio y es una de las fuerzas que puede inclinar la balanza en las votaciones que necesitan mayoría simple para aprobarse -es decir, 13 votos positivos-. Las bancas de los libertarios platenses pertenecen a Guillermo Bardón y Florencia De Feo. Los mileistas cuestionan por razones lógicas las políticas implementadas por Alak y aunque mantienen diferencias sustanciales con el PRO -un eco de lo que pasa en el Congreso Nacional y en buena parte en la Legislatura bonaerense-, hay rumores de una posible unificación parlamentaria o al menos “un pacto de convivencia por conveniencia” para ganar poder de negociación en el recinto.
El Concejo tuvo tres sesiones ordinarias y salvo la rendición de cuentas del período 2023, no hubo votaciones significativas que dejen expuestas las posturas de los cuatro bloques en que se dividen las 24 bancas del Concejo. El año legislativo recién comienza y se esperan especulaciones, roscas y movimientos de piezas. La Octava Sección, rompecabezas para armar.