La situación descoloca a la oposición que, en la voz de sus principales referentes como Florencia Saintout y Victoria Tolosa Paz, reclaman mayor intervención, pero no encuentran eco en la sociedad platense, que parece más inclinada a disfrutar de la mayor flexibilidad que le ofrece el gobierno municipal.

Además, la política de no intervención se limita a los estrictamente sanitario, ya que en otras áreas la comuna decidió avanzar a paso firme y por ejemplo, aprovechando la crisis interna del Frente de Todos platense, instaló una feria itinerante con carne a precios accesibles emulando el "Carne para todos" que el kirchnerismo no supo, o no quiso reeditar.

La Feria se desarrolla en el marco de la Secretaría de Relaciones Políticas e Institucionales que conduce Fabián Lugli y supera con creces a los precios de referencia del plan del gobierno nacional, por lo que tiene en sí mismo un mensaje político.

Además esta semana empezó a notarse el éxito de Garro al elegir a Saintout como principal referente de la oposición, ya que como habíamos adelantado finalmente Tolosa Paz reaccionó intentando marcar la cancha para mantenerse en el centro de la escena mientras que desde el gobierno nacional intentan garantizarle un espacio legislativo para que no pierda la línea de flotación.

Fue justamente la titular del Consejo Argentina contra el Hambre, la que cerró la semana con agenda protagónica, ya que logró reunir para la firma de un convenio a titular de la Fundación Pro Humanae Vitae, Rafael Velazquez, y a importantes personalidades del ámbito local como el director de Cáritas La Plata, padre Cristian Conçalvez; el presidente del Banco Alimentario local, Pedro Elizalde; la Rectora de la Universidad Católica de La Plata, Rita Gajate, y el presidente de la Federación de Instituciones Culturales y Deportivas de La Plata, Alberto Alba.

Desde la UCALP, presente en esa reunión, devolvieron el favor inmediatamente con un demoledor informe que se conoció este viernes y en el que se demuestra que en la periferia platense los asentamientos crecen más rápido que en el resto del país, lo que seguramente se convertirá en blanco de las críticas hacia la gestión local en los próximos días.

De cualquier manera y siempre que no se saturen las terapias en los hospitales, el acuerdo tácito de Garro con los comerciantes y gastronómicos parece estar funcionando de forma correcta y es suficiente para frenar las críticas de los sectores de la oposición.

La pincelada final del acuerdo llegó con la decisión de “eximir a todos los establecimientos comerciales afectados por las restricciones, del pago de la Tasa por Inspección de Seguridad e Higiene, de los Derechos de Publicidad y Propaganda, de los Derechos de Ocupación o Uso de Espacios Públicos y del Régimen Simplificado para Pequeños Comercios (Monotasa) por todo el período en el que se encuentren vigentes las medidas dispuestas”.

Una medida con alto costo fiscal, pero con alto rédito político si la apuesta le sale bien al jefe comunal.