¿El cristinismo se rearma desde un nuevo kilómetro 0?: lo que dejó la reunión en Ensenada
El contundente descargo de Cristina Fernández de Kirchner tras la condena a seis años de prisión por la causa Vialidad volvió a sacudir el tablero politico y obligó al Frente de Todos a reordenar las prioridades preelectorales rumbo al 2023.
Bastión K de resistencia por excelencia en los últimos años, la localidad de Ensenada fue el epicentro de un nuevo cónclave del FdT, con el núcleo duro del kirchnerismo como protagonista, tras el fallo contra la vicepresidenta.
Con el jefe comunal Mario Secco como anfitrión, la plana mayor de la Cámpora tomó las riendas del "operativo resurrección".
Tan solo un puñado de horas después del descargo desde su despacho del Senado, la propia CFK se apersonó en la tierra del Fuerte Barragán que para bajar una línea clara en un escenario esquivo.
Según trascendió, le ordenó a los presentes en el asado con formato de mitín "que se pongan a trabajar" en el territorio para no perder volumen electoral.
Máximo Kirchner, Axel Kicillof, Andrés "el Cuervo" Larroque y un puñado de intendentes, funcionarios y legisladores fueron testigos de la radicalización de la jefa del espacio, que dejó una señal clara (aunque no deseada por muchos): "Si mi nombre no está en la boleta", el peronismo tiene que resistir desde las bases.
Como explicó NOVA, los dirigentes con territorio quedaron desconcertados ante las palabras de la ex presidenta tras el fallo, que blanqueó que no pondrá en juego su nombre electoralmente a la hora de definir las candidaturas.
De cumplirse su promesa, muchos dirigentes con el territorio y los concejos "copados" por JxC quedarán huérfanos en la contienda electoral, y esa es por estas horas la mayor preocupación en las agitadas filas del FdT.
Trascendió del entorno de Secco que la cena/cónclave dejó conformr al anfitrión pero por los motivos ya expuestos, no a todos los presentes.
Ensenada es uno de los núcleos de resistencia K cuando, en el 2015, Secco logró conservar el territorio a pesar de que el peronismo fue desplazado de los municipios vecinos de La Plata y Berisso.
Por entonces, el macrista Julio Garro se hizo de las riendas de la capital bonaerense y si par Jorge Nedela hizo lo propio en el verdadero kilómetro cero del peronismo.
En La Plata, donde sigue gestionando Garro, el FdT escuchó con atención los ecos del mitín ensenadense y por estas horas el PJ, que es presidido por el camporista Ariel Archanco, analiza cómo rearmar el rompecabezas local en la nueva coyuntura.
