Panorama Político Platense
El escenario político

Tenso hermetismo en el FpV y disputa por el ingreso de ediles en la lista de Massa

El kirchnerismo y Cambiemos se llevaron en la ciudad el 65 por ciento de los votos. El FR en UNA, con magra cosecha, sólo aspira a colar concejales.

Las primarias ya son parte del anecdotario pero las esquirlas pos-electorales se dispersan por despachos, búnkers y pasillos por donde transita el poder de la Octava Sección.

Todavía calentando los motores para encarar las semanas más intensas de la campaña que depositará a un nuevo intendente de la ciudad o marcará la continuidad de gestión materializado en un tercer mandato a cargo de Pablo Bruera, los principales aspirantes al sillón municipal gastan horas en diseñar estrategias para conseguir retener/aumentar el caudal de sufragios conseguidos el 9 de agosto.

Como se sabe, hay cosechas pobres y otras más nutridas, pero al ritmo de especulaciones que están a la orden del día, tanto en el oficialismo como en las fuerzas de la oposición la expectativa está en superar los guarismos alcanzados.

En el bruerismo, por estos días, reina una mezcla de esperanzada expectativa y el sinsabor de no haber superado los 25 o 27 puntos proyectados inicialmente; cifra a la que ahora la tropa del jefe comunal planea llegar con la "colaboración" del ultrakirchnerismo encarnado en la decana de Periodismo Florencia Saintout, devenida en la segunda candidata más votada y "dueña" del 14.7 por ciento de los votos positivos emitidos hace tres domingos.

Este portal ya explicó en esta habitual columna el abc del comienzo de las negociaciones para llegar a que el FPV se quede con el municipio y darle al kirchnerismo una victoria en la capital provincial. Ya se habla de condicionamientos y ofrecimientos de cargos en un eventual nuevo Gabinete en el que muchos imaginan al bruerismo puro mezclado con el camporismo: un mix difícil de proyectar para otros, sin embargo.

En la oposición, el Frente Cambiemos unificó sus esfuerzos que, materializados en fotos compartidas entre el macrista Julio Garro -el ganador de la compulsa interna- y los radicales Claudio Pérez Irigoyen y Sergio Panella simbolizan al decir de observadores "la única posibilidad de un cambio de timón" en la ciudad, gobernada por el peronismo en los últimos 24 años.

En esta parte del tablero político también hay "runrunes" sobre equipos de gestión compartidos ante un eventual golpe de gracia al justicialismo en manos del macrismo respaldado por la UCR lugareña. Pero nadie asegura nada; todavía no hay certezas de cómo se contarán los porotos.

Se trata de un caudal de votos del 65 por ciento entre los principales contrincantes, que se complementa con poco más de 17 del massismo formalizado en UNA, donde José Arteaga y quien lo siguio, Marcelo Leguizamón, ya disputan la composición de la lista de concejales que competirá en octubre.

Ocurre que el arteaguismo -respaldado por el diputado y operador Juan José Amondarain-, se quedó con el 5 % de esos 17 (menos del 30 % del total obtenido por los cinco candidatos), cifra calificada como "insuficiente" por los seguidores del "Chuby", que ya meten presión para colocar en el segundo lugar de la nómina encabezada por el académico Luciano Sanguinetti al ex alakista Alberto Delgado, quien declinó su aspiración por la intendencia para quedar primero en la hilera de candidatos a ediles del "chubysmo". Quien ostenta ese casillero en la lista triunfante es el referente del moyanismo regional Miguel Forte.

Los ganadores dicen, tal como el propio Arteaga salió a aclarar en declaraciones radiales no bien tuvo los primeros números fríos de lo que derivó en su victoria horas después de cerradas todas las mesas en los colegios, que "si ningún candidato llegó a superar el piso de 30 por ciento" -tal como ocurrió-, la lista será integrada "cien por ciento" con candidatos propios. El mismo argumento esbozado, con intereses contrapuestos, por el otro sector.

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