El Concejo Deliberante de La Plata comenzará a debatir esta semana, un proyecto de Ordenanza presentado por el concejal José Arteaga, que establece que la venta y comercialización de Tarjetas SIM utilizadas en los teléfonos móviles sólo podrá efectuarse en comercios y agencias habilitadas y no en kioscos, almacenes o polirrubros.
“La idea es regular y generar un mecanismo de control ante la venta indiscriminada de chips de telefonía, ya que, sin duda esta situación permite que se realicen distintos hechos delictivos con un constante cambio de líneas”, explicó Arteaga y añadió “hoy, podemos comprar tarjetas de teléfonos móvil en quiscos, polirrubros, puestos de diarios, entre otros lugares, sin que quede registrado ningún dato de quien efectuó la compra”.
La norma establece, también, que quienes se dediquen a la venta de los denominados “chips” deberán llevar a cabo un registro en donde se consignen todas las operaciones realizadas, que permita identificar a quienes adquieren las distintas tarjetas.
“Hemos verificado que en distintos comercios de la ciudad se venden tarjetas SIM sin ningún control. Cualquier persona puede comprar, si quiere, infinidad de chips lo que implica que esa situación pueda ser aprovechada por quienes se dedican a cometer ilícitos”, señaló el concejal del bloque Peronista.
En caso de incumplimiento de la Ordenanza el Ejecutivo Comunal podrá implementar sanciones que van desde el retiro de la mercadería y el pago de una multa, en primera instancia, hasta la revocación de la habilitación municipal.
“Medidas similares se han llevado a cabo, con éxito, en otros países como Francia, Inglaterra o México”, sintetizó Arteaga y añadió “la venta indiscriminada de chips telefónicos favorece el delito”.
En el 2004, se sancionó la Ley Nacional Nº 25891 de Servicios de Comunicaciones Móviles que dispuso que las empresas que comercializaran equipos o terminales móviles podrían realizarse, únicamente, a través de empresas legalmente autorizadas para ello y, además, estipuló que se deberían registrar y sistematizar los datos personales, filiatorios y domiciliarios que permitiera una clara identificación de los adquirientes.
