Panorama Político Platense
El escenario político

Otra reunión infructuosa entre Garro y la UCR mantiene encendida la alarma en Cambiemos

El intendente, que la semana pasada se dio una vuelta por el Concejo, intenta mantener a Cambiemos como un bloque unido. La relación con el radicalismo en su peor momento. (Ilustración: NOVA)

A ritmo de los vaivenes de una conflictiva relación, el macrismo y el radicalismo platenses continúan su novela de tire-afloje. Desde que Cambiemos ganó la municipalidad de La Plata despojando al ex intendente Pablo Bruera, hubo una decena de reuniones –cuatro en el club San Luis- en las que las partes intentaron fumar la pipa de la paz, pero como se describió en este espacio en reiteradas oportunidades, nada de eso ocurrió.

Cuando la jornada del último jueves promediaba, un puñado de horas antes de que al alcalde platense se reúna con un nutrido grupo de periodistas en un camping de los contornos de la ciudad, una vez más los boina blanca platenses se reunieron -con el jefe comunal Julio Garro en búsqueda de blanquear la cada vez más tirante relación. Fue un encuentro no difundido oficialmente que se realizó en el Salón de Acuerdos del Palacio Municipal y según según pudo saber este medio de fuentes al tanto de la tertulia, terminó sin mayores certezas sobre el futuro del espacio.

Se supo que el radicalismo le fue a plantear al alcalde lo que, hace poco más de una semana, pregonaba un comunicado oficial emitido por la Junta Central de calle 48 rompiendo la calma política en las diagonales: la necesidad de formar un interbloque en búsqueda de “mayor autonomía” pero sin romper la coalición que los depositó en el Gobierno, un formato que al garrismo nunca terminó de cerrarle.

“La mesa de conducción política nunca funcionó y a esta altura ni siquiera el tema son los cargos, sino la marcha de la gestión y la falta de participación en la toma de decisiones”, se quejó uno de los radicales presentes resumiendo la postura de buena parte del sector. Estuvieron en el encuentro los ediles del bloque Cambiemos (integrado por Juan José Cardozo, Florencia Rollié, Claudio Frangul y Guillermo Ronga) y los dirigentes partidarios Marcelo Uriarte y Marcelo Viñes, presidente y vice del centenario partido.

En las últimas horas, ganó fuerza en los corrillos políticos la idea de que el oficialismo habría “anestesiado” la revuelta radical con incentivos para algunos de sus dirigentes. “No se explica cómo pasaron de querer romper a meter en el tema en el freezer en menos de 48 horas”, resumió un analista de los vericuetos políticos platenses que además tiene llegada a las filas militantes radicales, donde a esta altura ya se habla de dos bandos: "los tibios" y "los combativos".

Más allá de la especie, lo cierto es que los ediles más cercanos a mantenerse dentro de un único bloque son el referente de Rapaca Guillermo Ronga y Claudio Frangul.

Quien estaría tomando distancia de esta postura es el por ahora titular de la bancada –formalmente unida-, Juan José Cardozo, un alfonsinista puro. El caso de Rollié es conocido por todos: forma parte de “la pata díscola” de la UCR, con el ex diputado Sergio Panella, el médico Claudio Pérez Irigoyen –ambos rivales de Garro en las Paso- y el operador histórico Javier Quinterno como protagonistas de una mesa política que quiere volver a retener las riendas del partido –la interna está prevista para el mes de septiembre-.

El encuentro entre Garro y sus disconformes socios fue formalmente preparado para trazar un panorama de la implementación del SAME en la ciudad, un sistema cuyo manejo habría sido ofrecido a los radicales por el intendente a raíz de su participación en la secretaría de Salud municipal, por ahora a cargo de Alfredo Luchessi, hombre consensuado entre el intendente y Pérez Irigoyen; uno de los pocos cargos de relevancia para los seguidores del partido fundado por Leandro Alem.

El propio Garro, desde hace un tiempo, se muestra en redes sociales anunciando casi como una prioridad el sistema sanitario que contará inicialmente con 15 ambulancias, un centenar de médicos, 80 choferes, 25 radioperadores y una veintena de telefonistas.

"Runrunes" en el Concejo

En el marco de los acomodamientos del deliberante, la usina de rumores -donde desde hace semanas flota la especie de la ruptura del oficialismo-, incluyó en las últimas horas la posibilidad de un cambio de timón en la titularidad del cuerpo, hoy a cargo del ex integrante de la juventud PRO, Fernando Ponce, miembro fundacional del macrismo en la Octava Sección.

Concretamente trascendió que su lugar podría ser ocupado por el titular de la comisión de Hacienda, Julio Irurueta, quien a pesar de los rumores que a principio de año lo proyectaban para esta fecha en algún cargo en Capital Federal, se mantiene en el recinto como una de las espadas de Cambiemos y es habitual portavoz del garrismo.

La movida, -que es desmentida por algunos referentes "poncistas"- tendría que ver, entre otras cuestiones en las que podría caber una prematura puja con vistas al 2017, con las conocidas "diferencias políticas" que el edil más importante del Concejo tiene con la jefa de Gabinete Natalia Vallejos, una protegida de Garro.

Otra de las conjetura que volvió a recobrar fuerza en la semana que termina es la posibilidad de que se produzca un quiebre dentro del ultrakirchnerismo, donde las bancas son ocupadas por Florencia Saintout, Guillermo Cara y Gastón Castagneto.

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