Marcha frente a los Tribunales Federales en contra de los beneficios a genocidas
Organizaciones de sociales, de Derechos Humanos, Políticas, familiares de desparecidos, víctimas de la dictadura y movimientos estudiantiles se concentraron este mediodía en las puertas de los Tribunales Federales de La Plata, para manifestar su rechazo a la decisión de la Corte Suprema de Justicia de otorgarle el beneficio conocido como “dos por uno” al genocida Luis Muiña.
Con la presencia de Madres de Plaza de Mayo y la agrupación HIJOS, el pedido principal fue el juicio político y la destitución de Elena Highton de Nolasco, Carlos Ronsenkratz y Horacio Rossatti, los tres jueces que votaron a favor de que se aplicara una conmutación de penas al represor, acusado y condenado por cometer crímenes de lesa humanidad.
En sentido, en diálogo con NOVA, el abogado de Derechos Humanos que colaboró con el CELS (Centro de Estudios Legales y Sociales) en los juicios a las Juntas militares, Pablo Llonto, afirmó que “nos parece que si todo el arco político está considerando que esta sentencia es una aberración, la consecuencia de eso entonces decir que hay un mal desempeño en las funciones y es una de las causales que establece la constitución para sacar a los jueces de la Corte”.
En relación a la tardanza en declararse en contra de la sentencia por parte de los funcionarios del gobierno, sostuvo que “Duran Barba debe ser el que les pasa el dato de cuando hay que hablar y cuando no. Da la impresión de que ocurrió eso, que midieron primero con alguna encuesta que dice el 80 por ciento estaba en contra de la aplicación del dos por uno a los genocidas. Es muy hipócrita lo que hacen, ojalá que aparezca alguno que lo haga sinceramente y rompa con el macrismo”.
En esa misma línea, Llonto agregó que “tal vez haya sido eso lo que por ejemplo hizo que Claudio Avruj, a quien se le está pidiendo la renuncia en todos los ámbitos posibles, dijo que aceptaba primero la sentencia, que estaba de acuerdo y después se dio vuelta y dijo que había analizado y que pensaban que no era un buen fallo. El problema central es la política del gobierno, pero si uno pudiera enumerar la cantidad de cosas que están haciendo en contra de juzgamiento estaríamos dos horas”.
Sobre la posición de Mauricio Macri en el tema, afirmó que “él es el que trajo a Rosenkratz y a Rossatti, el que le permitió a Highton de Nolasco violar la Constitución que dice que a los 75 años los jueces se tienen que jubilar, y como a ella le gusta mucho el cargo, el poder y la plata, decidió quedarse y el gobierno que decía que le iba a hacer cumplir, cuando salió la sentencia del amparo que presentó Highton, no apeló. Ahí evidentemente hubo una negociación con alguien del gobierno y acá tenemos los resultados”.
“La leyenda de la justicia independiente nadie la puede creer y hay que enseñar que eso no existe, en ningún gobierno. Creo que está claro que no hay jueces en Argentina independientes, Rosenkratz y Rosatti son jueces del macrismo, lo hizo entrar Macri con una negociación con algunos senadores traidores del Frente Para la Victoria. Lo que está bueno es que esté ocurriendo una rebelión de muchos Tribuales Orales que están sacando pronunciamientos que no aplican el dos por uno y no acatan ninguna decisión de la corte”, concluyó Llonto.
