En la provincia de Buenos Aires el matancero Fernando Espinoza tiene los días contados en su mandato y de las decisiones que se tomen en materia proselitista en la arena bonaerense, se desprenderán las de los distritos.

En La Plata, la interna partidaria del PJ de calle 54, buscará perfilar a algún dirigente que, de hacerse de la conducción institucional, tendrá un bastión imprescindible para catapultar propuestas electorales de cara a las ejecutivas del 2019.

Hasta mediados de diciembre el intendente Pablo Bruera mantiene mandato. Las fechas previstas del cronograma electoral son: 16 de noviembre para la presentación de listas y 17 de diciembre para el la compulsa.

Pero todo hace prever que debido a “reacomodamientos” poselecciones, la interna se pateará para marzo, cuando “el panorama esté más claro”, según repiten a coro la mayoría de los pejotistas. Una de las excusas que asoman a la vista para justificar la postergación es el escaso tiempo para cumplimentar con los requisitos formales que le den forma a la interna.

Ensalada peronista (aún sin condimentar)

Todavía en etapa de iniciática experimentación, se prevé que el bruerismo siga haciendo política e intentará hacerlo desde las riendas del partido, ya que el espacio perderá la banca de Gabriel Bruera en el Concejo –también la de Gabriel Céspedes- y si bien colocó a un hombre del riñón –Guillermo Escudero- como segundo diputado provincial, la realidad no será la misma que hasta aquí

Se esperan además, gestos políticos de disputa partidaria por parte del ex intendente Julio Alak, quien quiso jugar fuerte en la legislativa que ya es historia pero cuando Cristina Fernández de Kirchner conformó Unidad Ciudadana se quedó sin margen de maniobra. No obstante, “el Turco” pudo colocar a un delfín suyo en el Concejo: se trata del ex funcionario de ANSES Norberto “Chucho” Gómez –desde que se fue Sebastián Tangorra el alakismo carecía de bancas propias-.

Otro de los dirigentes que ahora desde el llano podría intentar recuperar terreno perdido es el ex titular de AUBASA durante el sciolismo Gonzalo Atanasof, a quien le ofrecieron el cuarto puesto en una de las listas locales y pegó el portazo por considerar “poco serio” el ofrecimiento en relación a lo que se había negociado oportunamente.

El sector que jugó recientemente con el randazzista Cumplir y es compuesto por el gremialista de ATSA y concejal Pedro Borgini, por el ex funcionario bruerista Santiago Martorelli y por la edil Lorena Riesgo, entre otros, también tienen una pieza del rompecabezas del peronismo lugareño.

Aunque no tienen fibra de peronistas tradicionales ni demasiado rodaje en los ámbitos del peronismo tradicional, no se puede descartar que las cabezas de listas de Unidad Ciudadana para Diputados y el Concejo –es decir Florencia Saintout y Victoria Tolosa Paz- intenten meterse en la discusión. A priori, todo perecería indicar que se dedicarían a amasar poder legislativo desde las bancas que consiguieron.

Hay otros componentes sueltos identificados con el peronismo que también podrían anotarse. Tales los casos de la diputada provincial mandato a vencerse Valeria Amendolara y los dirigentes Esteban Concia o Guillermo Chaves, los últimos personajes menores del mapa peronista local que sin embargo siempre tratan de “meter la mano en la lata”.

Otro grupo de “dirigentes” independientes capitaneados por el arquitecto Sergio Poggi también podría intentar meterse en la discusión y en formato “bonus track” también hay que mencionar a otros actores que tuvieron intermitentes apariciones en la escena partidaria como el dirigente Claudio Gallo o el docente Jesús María “Tito” Plaza.

Otra de las posibles novedades que asoman en la iniciática etapa de reconstrucción es la conformación de una lista “sub 35” que apuntará a renovar los aires del justicialismo con “caras nuevas” y la mirada puesta en los próximos comicios.

Ensenada: la mesa de la discordia

Tras haber cosechado casi el 50% de los votos, la lista de Mario Secco superó las expectativas y logró meter 6 de los 9 concejales en pugna, además de quedarse con los tres consejeros docentes y con una diputada provincial para la tercera sección electoral, por primera vez en la historia de Ensenada. Sin embargo, desde el bunker de Cambiemos salieron a festejar y posaron en una foto mostrando 4 dedos, haciendo referencia al ingreso de 4 concejales de su espacio, y no 3 como indicó la Junta Electoral.

El 99,6% de los votos ensenadenses ya han sido contabilizados, solo resta terminar con el escrutinio de una de las 156 mesas, que sería del barrio El Dique. Cambiemos consiguió el 33,14% de los sufragios, y para meter el cuarto concejal necesita llegar a 33,33%, algo imposible porque en la mayoría de las mesas triunfó Unidad Ciudadana y, en las que ganó la lista opositora, fue por escasos votos.

Berisso: Nedela salta en una pata mientras el peronismo sigue fracturado

En el nuevo escenario legislativo berissense, de 20 concejales, 10 serán del oficialismo: de este modo, Jorge Nedela, intendente y principal referente de Cambiemos en la ciudad ribereña, reunió a los ediles electos y a los que continuarán con desempeñándose en el HCD dentro del Bloque, y puertas para adentro, les pidió que no hagan la plancha, ya que el Recinto es un lugar que se presta para ello.

Por su parte, desde Unidad Ciudadana, con un peronismo fragmentado confluyendo en una lista de unidad maquillada, ya analizan cómo hacer para recuperar el terreno perdido de cara al 2019: fue evidente que en este sector no se han subsanado aún las internas y las acusaciones cruzadas, situación que se reflejó en una campaña con cada uno por su lado; por eso, el propio Ramón Garaza estudiaría romper con los hermanos Mincarelli y postularse para la intendencia.

Punta Indio: con escasa diferencia entre ellos, el kirchnerismo y el macrismo ya apuntan al 2019

Durante las elecciones legislativas, el oficialismo no logró imponerse en las urnas y el propio intendente Hernán Y Zurieta sabe que debe duplicar los esfuerzos si quiere seguir siendo gobierno en el 2019: Cambiemos obtuvo 241 votos de diferencia sobre Unidad Ciudadana, lo que le permitirá al espacio renovar sus tres concejales.

Los ediles electos son los radicales Héctor Equiza y Laura Perugorría, y el macrista Gerardo Landa, por Cambiemos, y Beatriz Dal Cin y Guillermo Gadea por Unidad Ciudadana. La lista del ex intendente Equiza está barajando para subsanar heridas internas y lograr mantener la diferencia electoral dentro de dos años. En este contexto, ambos espacios analizan como reconstruirse para lo que se viene. Por otro lado, el Frente de Randazzo apenas cosechó 137 votos y el de Massa no superó las PASO.

Magdalena: un distrito rojo, teñido de amarillo

Magdalena es un distrito con fuerte esencia radical, hoy teñido de amarillo. Como era de preveer, Cambiemos logró el 52% de los votos (5687 sufragios), por lo que ingresarán tres concejales de la lista. Detrás de la nómina que encabezó Mariel Semino, Unidad Ciudadana se ubicó como la segunda fuerza con el 24,8% (2685 votos). En diálogo con NOVA, la dirigente kirchnerista Patricia Añaños se mostró conforme con los resultados de los comicios: “Son muy favorables de cara al futuro político de Magdalena”.

En un acto de convivencia y respeto, los candidatos de Unidad Ciudadana se dirigieron al bunker de Cambiemos para felicitar a la Lista ganadora. Allí, Luciano Lencina, concejal electo en la Lista de CFK, les advirtió a los hombres y mujeres del intendente Gonzalo Peluso: “No se la vamos a dejar fácil, les vamos a dar pelea”. Por su parte, Cuqui Baudino de 1País entró como último concejal, arañando las paredes. Martín Landa, de Cumplir, con escaso apoyo en las urnas, observará las sesiones legislativas desde afuera.

Brandsen: un clavo que se llama Gastón Arias

“Si bien teníamos fe para ganar, no esperábamos esa diferencia”, expresó Raúl Paz, el actual presidente del Concejo Deliberante, que el domingo revalidó su permanencia en la banca por otros cuatro años. La lista de Cambiemos ganó cómodamente y sin sobresaltos, a pesar que en las PASO había sido derrotada por 3 mil votos a diferencia de Unidad Ciudadana.

Muchos pueden ser los motivos para entender un resultado que estuvo por encima de las propias expectativas de los ganadores, pero el análisis más fuerte es que los votos del médico Juan Branz se fugaron hacia el oficialismo, al momento de perder la interna de Unidad Ciudadana e ir junto al ex intendente Gastón Arias, que tiene imagen negativa en un sector importante de la población.