Panorama Político Platense
El escenario político

El massismo platense comienza a mostrar las cartas rumbo al 2017

Carlos Melzi retornó a las fuentes. Oscar Vaudagna representa una línea interna y Juan Amondarain capitanea el sector que ganó en la primaria 2015. (Ilustración: NOVA)

En el marco de los múltiples reacomodamientos de sectores políticos de raigambre justicialista en la capital provincial, con vistas a los comicios legislativos del año próximo, el Frente Renovador massista comenzó a insinuar sus intenciones de hacer pie en el tablero electoral para recuperar protagonismo en la agenda de discusión y aumentar el caudal legislativo conquistado en el turno electivo pasado.

El espacio encabezado por el diputado nacional Sergio Massa tuvo en la capital bonaerense una aceptable participación electoral en el 2015, donde a pesar de la fragmentación que presentó en las primarias –compitieron nada menos que 5 precandidatos- pudo colar algunos ediles y engrosar sus capacidad parlamentaria a 7 bancas, aunque a partir de algunas fugas, el bloque “oficial” quedó conformado desde principio de año por cinco legisladores (actualmente hay dos unibloques).

En ese contexto, una de las especies que corrió con mayor fuerza en los últimos meses terminó de confirmarse: el retorno del histórico armador local Carlos Melzi (ex edil) a las filas massistas. Después de algunos cortocircuitos típicos de la campaña, “el pelado” mantuvo varios encuentros con el tigrense, quien le pidió regresar a las fuentes con vistas al armado que ya se está forjando en los distritos para competir el año que viene.

La línea oficial del massismo local –que el año pasado ganó la primaria- está representada por el titular del bloque en la Cámara Baja bonaerense Juan José Amondarain, que tiene cuatro ediles propios en el Concejo local. Este espacio buscará relegitimizar su liderazgo y contener a la mayor cantidad de dirigentes posibles.

Un tercer sector –que integran los ediles Oscar Vaudagna y la recientemente unibloquista Marcela Farroni-, se referencia con el presidente de la Cámara de Diputados, Jorge “oveja” Sarghini”, garantía institucional de "gobernabilidad" de María Eugenia Vidal en la Legislatura provincial.

En el Concejo platense, la hipótesis del "massismo unido" aglutina nada menos que la tercera parte de la composición parlamentaria, idéntica cantidad de ediles que el oficialismo de Cambiemos, donde conviven macristas, radicales y referentes de la Coalición Cívica (aunque ya se habla de la posible ruptura del sector de la UCR que personifica Florencia Rollié).

La postura pública de los referentes de cada línea interna del FR es llegar a las urnas con la menor cantidad de fisuras posibles, para, de mínima, sostener las cuatro bancas que se vencen en 2017, una posición que se relativiza en las charlas en "off" con los dirigentes de cada sector.

En ese armado juega el referente de la CGT regional Miguel “Forte, un porteño devenido en “platense por adopción” que comenzó a hacer pie en la capital bonaerense luego de ser enviado como “interventor sindical”, hace ya un puñado de años. Su posición política es marcada por algunos detractores como “ambivalente”, ya que el año pasado volvió al Concejo gracias a la lista oficial del FR-UNA, aunque su jefe gremial, Hugo Moyano, está distanciado de Massa.

La situación en el kirchnerirmo duro

Son muchos los que se preguntan qué pasará con el ultrakirchnerismo en La Plata, donde lo que quedó de Unidos y Organizados está representado en una bancada que contiene a tres ediles: Florencia Saintout (La Cámpora) Gastón Castagneto (Kolina) y Guillermo “Nano” Cara (JP Buenos Aires), quien según se cuenta en los mentideros políticos estaría en una posición más que incómoda por sus distanciamiento con la decana de la facultad de Periodismo, de quien desearía despegarse para armar juego propio y mostrar síntomas de emancipación.

“Entiende que el kirchnerismo está en proceso de agonía pero a la vez no mueve un pelo sin el visto bueno de Florencia”, ilustró un allegado al sector, que sin embargo sostiene que de forma pública se intenta cuidar las formas.

Hay quienes no descartan una posible ruptura del bloque y alimentan esa especie en la cercanía que el dirigente que hace un par de años fue duramente cuestionado por su actuaciòn en la "ocupaciòn" del club Olimpia de Los Hornos, está sosteniendo con sectores del PJ como el bruerismo y un espacio residual de lo que fue el Movimiento Evita local.

La UCR se rompe y se dobla

El radicalismo en Cambiemos está en una situación de cortocircuito constante. La reciente conformación de la Mesa de Conducción Política que integró a sectores del PRO –con Garro a la cabeza-, el centenario partido y la CC, no conformó a los sectores que perdieron la interna con el jefe comunal, referenciados en el ex diputado Sergio Panella y el médico Claudio Pérez Irigoyen.

En el Concejo, este espacio tiene una banca, ocupada por la edil Florencia Rollié, esposa del histórico operador local Javier Quinterno. Por estas horas estarían definiendo una nueva fisura en la UCR, situación que derivaría en la conformación de un unibloque, lo que dejaría a Cambiemos con seis ediles propios y se formalizaría en una nueva interna en la puja por la conducción de la Junta Central de calle 48, que se renueva a fin de año.

Los chispazos que hace una quincena derivaron en un cruce verbal entre la edil y el macristaFernando Ponce –que se viralizó en los medios regionales- terminaron de definir una situación que “no da para más”.

Los dirigentes que quedarían con los pies dentro de Cambiemos son Juan José Cardozo (titular del bloque), Guillermo Ronga (Rapaca), Claudio Frangul y la actual conducción del partido, con Marcelo Uriarte (storanismo) y Marcelo Viñes a la cabeza.

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