El boliche "La Casona" sigue sumando denuncias por discriminación
![](https://pinterest.com/pin/create/button/?url=https%3A%2F%2Fwww%2Enovalaplata%2Ecom%2Fnota%2Easp%3Ft%3DEl%2Dboliche%2DLa%2DCasona%2Dsigue%2Dsumando%2Ddenuncias%2Dpor%2Ddiscriminacion%26id%3D49518%26id%5Ftiponota%3D24&media=https://www.novalaplata.com/data/fotos2/bbx_515490109_CASONA.jpeg&description=El boliche "La Casona" sigue sumando denuncias por discriminación)
Todo ocurrió en la puerta del boliche La Casona, ubicado en 11 y 44, donde Claudia Vasquez Haro, presidenta del colectivo Otrans y su compañera, Ariana Linares Araujo, fueron discriminadas a la hora de querer ingresar en el salón bailable.
"No vamos a tolerar que nos sigan tratando como ciudadanas de segunda", mencionó la titular del Colectivo Otrans, quien se encargó de dar a conocer cómo fue el episodio.
Al parecer el acto discriminatorio se produjo, durante la madrugada de Navidad, cuando Claudia y Ariana quisieron entrar a La Casona. Es que cuando llegó el turno del ingreso, dos patovicas de la puerta las frenaron y les preguntaron: “¿Ustedes están en la lista?”.
Instancia, en la que Vasquez Haro, se sorprendió porque notó que ninguna de las personas que estaban delante de ellas fueron consultadas . “Si no están en la lista no pueden pasar”, le dijeron minutos más tarde, aseguró la activista.
Motivo por el cual, entendieron que la situación que se produjo fue parte de un acto de discriminación, con el foco puesto en la condición sexual de Claudia y Ariana.
Asimismo, la titular del colectivo Otrans agregó que durante el intercambio de palabras con los hombres de seguridad, les dijo que ellas podían pagar la entrada, si era necesario; “y ahí me dijeron la verdad: `Ustedes saben que no pueden entrar`”, contó .
Es por eso que “les dije que íbamos a hacerles una denuncia y no les importó por eso decidimos subir el video donde se ve cómo estamos siendo discriminadas y hoy estamos por hacer la denuncia al INADI”, explicó la activista.
“Siento que es un retroceso de todo lo que hemos logrado. Yo me cansé de denunciar boliches discriminatorios en el 2000. Pero con la ley de identidad de género eso había empezado a cambiar. No vamos a tolerar que nos vuelvan a tratar como ciudadanas de segunda”, repudió.
No obstante, recordó que, quienes trabajaban en la seguridad le contestaron que el boliche se reservaba el derecho de admisión. “Eso no está permitido en el municipio porque viola tratados internacionales sobre los derechos de todas las personas”, aseguró y para concluir sostuvo: “Vamos a ir hasta las últimas consecuencias. No nos vamos a cansar de denunciar y luchar por nuestros derechos”.
Recordemos que ésta no es la primera vez que el Club es denunciado por prácticas discriminatorias, dado que en reiteradas oportunidades jóvenes han manifestado que no los han dejado ingresar porque llevaban puestas zapatillas o gorras.
