Concejales del FR repudiaron las agresiones sufridas en pleno recinto del Concejo Deliberante
La sesión del Concejo Deliberante de Ensenada se transformó este jueves en una verdadera tortura para los concejales que responden al Frente Renovador de Sergio Massa, al quedar a expensas de un centenar de iracundos manifestantes que respondían al Sindicato de Trabajadores Municipales de esa comuna.
El motivo de la manifestación sindical era repudiar un proyecto presentado por los massistas, en el que expresaban su desacuerdo por el cese de la fuente laboral de varios trabajadores de la salud por parte del municipio.
Ocurre que, según denunciaron los concejales opositores al ultrakirchnerista Mario Secco “la comuna no habría renovado sus contratos porque integraron una lista en el gremio de médicos bonaerenses denominado Cicop, al que abiertamente los ediles del FpV acusaron de intentar sacarle afiliados al STME, el gremio municipal del que Secco fuera 12 años secretario general hasta llegar a gobernar el municipio y que sigue conduciendo estratégica y políticamente”.
“Durante la sesión, los manifestantes ocuparon todos los espacios posibles en el recinto del primer piso del palacio comunal de La Merced y Don Bosco, y cuando se trató el correspondiente proyecto insultaron y amenazaron con una ferocidad inexplicable a cada uno de los concejales del FR que tomaron la palabra, y a dos de los profesionales cesanteados que presenciaban pacíficamente la reunión parlamentaria. Incluso uno de los principales referentes del gremio municipal agredió varias veces a los gritos y con insultos de tono personal y muy agraviantes a los ediles del FR, ignorando claramente el alto grado de responsabilidad que le confiere su cargo”, citaron los concejales renovadores.
Los representantes del ex intendente de Tigre aseguran que “varios manifestantes estuvieron al borde de la agresión física y algunos ediles oficialistas incitaron claramente a la violencia, con frases más propias de un barrabrava en plena tribuna que de un concejal en un recinto de sesiones”.
“Nosotros no somos ni queremos ser parte de disputa sindical alguna, pero entendemos que cortar un vínculo laboral de años con profesionales idóneos y muy queridos en sus ámbitos de trabajo, tanto por sus compañeros como por los vecinos de los barrios humildes en los que prestan servicio con vocación y esmero admirables, por el solo hecho de tratar de representar a un gremio distinto, es un error institucional que no debemos dejar de marcar. Y pedimos que se los reincorpore a sus tareas, por el bien de amplios sectores de vecinos ensenadenses que ven en ellos, desde hace años, una solución a sus problemas de salud y no un problema sindical”, aseguraron los ediles massistas de Ensenada.
