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Bebés, abuelos y marginados, los más afectados

Con el otoño llegó el frío y se multiplicaron las enfermedades respiratorias

Vacunación e higiene, los ejes contra la gripe. (Foto: NOVA).

El intenso frío volvió a sentirse en la ciudad de las diagonales y, de su mano, se multiplicaron las enfermedades respiratorias en la región. El cambio de estación tiene su efecto en la salud y es por eso que en los nosocomios reforzaron las medidas de prevención y profundizaron la aplicación de vacunas antigripales.

“La campaña fuerte comenzó esta semana, que las temperaturas descendieron drásticamente”, explicó Héctor Hasta, pediatra y jefe del Centro de Salud Número 26, ubicado en calle 604 y 122, en diálogo con NOVA.

“No estamos con un cuadro como en años anteriores, en donde las bronquiolitis nos tapaban, recién empieza, el pico es en julio”, agregó el profesional de la salud.

La llegada del otoño trae consigo un aumento de las enfermedades respiratorias como la gripe (ETI) y las Infecciones Respiratorias Agudas Bajas (IRAB), entre las que se encuentran las neumonías y las bronquiolitis. Frente a esta situación, el Ministerio de Salud de la Provincia recomienda que se recuerden las medidas sociales de prevención, se respete el esquema de vacunación y no se opte por la automedicación.

El descenso y los cambios de temperatura, los fuertes vientos que ayudan en la caída de las hojas, el polen y el polvo en el aire, todos estos cambios hacen que seamos más sensibles a las enfermedades respiratorias y las alergias, sobre todo los niños, ancianos y las personas que tienen problemas respiratorios.

Asimismo, Hasta afirmó que “las condiciones socioeconómicas de la gente, al vivir en casas precarias, no tan permeabilizadas al frío, también complica la situación”

El doctor del Centro de Salud ubicado en Villa Montoro concluyó: “Las condiciones socioambientales del nuevo asentamiento de 610 a 615 y 122 a 125 no contribuyen a cuidar la salud de los niños”.

Prevención

La bronquiolitis, neumonía y las enfermedades tipo influenza (ETI) se intensifican durante estos meses, con el arribo del clima otoñal, y afectan sobre todo a las personas que padecen asma y otras enfermedades pulmonares y bronquiales. En el caso de los niños, especialmente en los menores de dos años, debe prestarse atención a las IRAB: las más habituales son la bronquitis, bronquiolitis y neumonía.

Las medidas preventivas más importantes a tener en cuenta son: protegerse con la vacunación antigripal; mantener el lavado de manos frecuente, sobre todo al llegar al hogar; evitar concurrir a espacios públicos cerrados con gran concurrencia; mantener ventilados los ambientes y realizar limpieza de la casa con lavandina; no fumar en ambientes cerrados y mucho menos si hay niños; y mantener la lactancia materna como potente generadora de defensas en el caso de los bebés.

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