En la misiva, los ecologistas exigieron al municipio que implemente un seguimiento y de la obra, como así también un monitoreo de los planes y procedimientos para prevenir y mitigar daños en el medio ambiente. Asimismo, definieron como “trucho” el informe para avalar el emplazamiento realizado por la subsecretaria de Obras Públicas bonaerense, Ingeniera Patricia Tombesi.

En este aspecto, vale recordar que en su momento uno de los integrantes de la entidad ecologista local, Héctor Moretti, había señalado a NOVA que el informe en cuestión presentado pro Tombesi “no es un estudio porque son seis hojitas que lo único que hace es un planteamiento de lo que es la biología de la construcción, no tiene aporte de bibliografía, no tiene un estudio científico, ningún tipo de impacto ni estudio social”.

En este contexto, al advertir los avances en esta obra, los ambientalistas solicitaron al Departamento Ejecutivo municipal que no espere el control de Provincia (como está estipulado) y que tome cartas en el asunto, frenando la obra al no cumplirse los procedimientos estipulados originalmente.

Tras la lectura de la nota, el concejal del Frente Renovador, Daniel Caraballo, solicitó un “pronto tratamiento” del tema, al tiempo que enumeró algunos incumplimientos al protocolo del OPDS en los que se está incurriendo mientras avanzan los trabajos, faltas como la ausencia de una triple barrera forestal. Al manifestar preocupación por la evolución de la obra, el edil massista pidió la creación de una comisión municipal que realice el seguimiento adecuado.

Por su parte, desde el bloque oficialista, el concejal José González prefirió enfocarse en remarcar la importancia de la obra, algo que no está en tela de juicio, sino lo que se cuestiona es el emplazamiento escogido. “Nos va a modificar la vida”, vaticinó al tiempo que libró de toda responsabilidad al municipio: “No tiene incumbencia el Ejecutivo municipal”, remarcó para sólo sugerir que la empresa encargada de los trabajos otorgue al intendente un avance de obra pero “de forma protocolar”.

Asimismo, el edil oficialista subrayó que “la Justicia ya se expidió”, desestimando el recurso de amparo que en su momento la entidad ecologista había presentado, en tanto que fustigó algunas denominaciones vertidas en la nota, tales como la calificación de “trucho” al informe de Tombesi: “No voy a permitir algunos términos utilizados en esta nota”, expresó González al tiempo que se mostró “muy tranquilo” por los controles que, según él, estarían realizando en el lugar.

En contraposición a esto, el concejal del Frente Renovador, Edgardo Badano, le recordó a González que la Justicia desestimó el amparo ambientalista pero basándose en el correcto cumplimiento de las disposiciones contempladas en las resoluciones del ENRE y el OPDS, por lo cual instó al monitoreo para el debido acatamiento de los protocolos.

Desde el bloque radical, el concejal Daniel Cappelletti recordó que había “otros lugares” para emplazar la subestación y que tenían la factibilidad del ENRE pero que no había fondos, por eso es que se definió en el sitio actual. A su vez, adelantó que desde su bancada se está trabajando en la redacción de un proyecto de Ordenanza para establecer las responsabilidades del municipio en el control de la subestación, lo cual significaría poder acceder desde el Ejecutivo municipal al monitoreo de empresas de Categoría III (como será la subestación), algo que hasta el momento sólo está limitado a la competencia de Provincia.