Muchas escenas que se observaron durante este año en el Concejo Deliberante local han logrado curtir la capacidad de asombro de varios de los que asiduamente suelen presenciar las sesiones. Sin embargo, si hay algo en lo que parece perfeccionarse la mayoría oficialista es en utilizar recursos para dejar boquiabiertos a propios y extraños.

En esta maratónica sesión, que tuvo su primera mitad el lunes y se completó el miércoles, el panorama lucía apacible más allá de algunos debates propios del recinto. No obstante, ya en los últimos puntos, la olla a presión volvió a estallar y esta vez con más fuerza que nunca.

Se denunció avasallamiento de la Ley Orgánica, se habló de desprecio al sistema democrático y hasta se juzgó al actual cuerpo deliberativo como “la peor composición de toda la historia de este pueblo”.

El detonante fue nuevamente la puesta en marcha de la maquinaria de la mayoría automática. Aunque en esta oportunidad se hizo mediante un procedimiento que dejó en el ambiente la preocupante sensación de las voces que son silenciadas.

De un dictamen…

Todo comenzó cuando llegó el punto donde se trataba un dictamen sobre la creación de la comisión interna de seguridad en el ámbito del Concejo, propuesta que había sido elevada sesiones atrás por el radicalismo teniendo en cuenta que el municipio se sumó al sistema de policía comunal, creando además la Dirección de Seguridad.

Asimismo, se solicitaba en este dictamen la modificación del artículo 20 del reglamento interno del deliberativo brandseño para que se contemple la mencionada comisión.

Al respecto, el concejal radical Antonio Marra (h) afirmó: “Me parece que no podemos esperar más a trabajar en esta comisión”. Sin embargo, ya intuía lo que se venía: “Yo entiendo y creo que, por la presentación de hoy, una reforma un poco más integral del reglamento interno elevado a este concejo por el bloque del Frente para la Victoria, este dictamen no va a tener acompañamiento. Espero equivocarme porque no invalidaría al bloque del Frente para la Victoria acompañar este dictamen y poner en funciones a esta comisión que me parece que ya no se puede dilatar más en el tiempo”.

“Empecemos a trabajar de una vez por todas en esta cuestión que tiene muy inquieta a la comunidad”, expresó Marra a la vez que solicitó al bloque oficialista desarrollar en comisión “un trabajo exhaustivo sobre la necesidad de reforma que tiene nuestro reglamento interno que quizás vaya más allá del proyecto presentado”.

… a otra cosa

Luego de Marra, llegó el turno de la edil oficialista Luciana Villano, quien mocionó por pasar a un cuarto intermedio para “modificar” el dictamen propuesto y hacer otro “en conjunto, aunque en realidad lo que se tenía pensado era suplantar ese dictamen por el proyecto de reglamento interno del Concejo impulsado por el bloque del FpV.

Paréntesis aclaratorio

Seguramente usted, estimado lector se preguntará ¿Qué tiene que ver un dictamen de creación de la comisión de seguridad con otro que apunta a la modificación del reglamento interno? Pregunta tan válida como difícil de justificar.

Lo cierto es que, dentro de las modificaciones planteadas al reglamento interno, desde el oficialismo se propone allí la creación de una comisión que abarque el tema seguridad aunque bajo el nombre de ‘Comisión de protección ciudadana’.

Asimismo, se escuda con que en el proyecto original se habla de una modificación al reglamento interno, aunque sólo era para lo que ataña a las comisiones.

Vale aclarar que el proyecto de modificación del reglamento había sido enviado a comisiones el pasado lunes. No obstante, el miércoles pareciera que los concejales oficialistas se levantaron con cierto apuro y decidieron sacarlo por dictamen.

El reglamento de…

Vale aclarar que esa modificación del reglamento interno del Concejo fue una presentación hecha (o al menos firmada) por el presidente del deliberativo, Marcelo Giovannone, quien, seguramente motivado por la llegada de Ernesto Cattoni como asesor de su bloque, se inspiró para realizar una cuantiosa modificación.

Pero ¿qué es lo que se modifica? Son varios artículos que le dan marcada prioridad a la mayoría, creando, además de la comisión de protección ciudadana, las comisiones de Cultura y Educación y la de Derechos Humanos.

Pero hay un punto por demás polémico: en la modificación del artículo 26 se expresa que “la designación de los miembros de las comisiones internas serán a propuestas del bloque de partido o alianza con el que fuera electo cada concejal”.

Con esto, los concejales que se despegan de su bloque originario para conformar bloques unipersonales, quedarían fuera de las comisiones y sin posibilidad de impulsar sus proyectos en ese ámbito indispensable para elaborar dictamines. Traducido a la actualidad: el bloque Kolina-Causa Popular, representado por Marcelo Castillo, quedaría al margen de los trabajos en comisión, con todo lo que ello implica.

El estallido

Al volver del cuarto intermedio pedido por Villano, Giovannone directamente llamó a poner a votación el dictamen del oficialismo (de modificación del reglamento interno) el cual no tenía despacho de comisión, pretendiendo no dar siquiera lectura del proyecto. Ante este acto de avasallamiento a las minorías, se desató la furia de los ediles opositores, furia que textualmente se dio así:

­–Giovannone: Se pone a votación el dictamen…

–Paz: ¿Cómo se pone a votación?

–Giovannone: Se pone a votación…

–Castillo: ¡¡¡No vamos a votar, vamos a debatir!!!

–Paz: ¡¡¡Léalo, cómo voy a votar una cosa que no sé lo que es!!!

–Giovannone: La incorporación del dictamen voy a poner en consideración.

–Paz: ¿Cuál dictamen? Si ya hay un dictamen ¿Cómo va a incorporar un dictamen?

–Giova: Yo propongo un dictamen…

–Paz: ¿Uno nuevo va a incorporar?

–Giovannone: Sí, un dictamen que se elaboró recién.

–Paz: “¡¡¡¿Cómo va a incorporar un dictamen sin despacho de comisión?!!!

–Castillo: ¡No se puede avanzar sobre la Ley Orgánica de las municipalidades!

–Giovannone: Los que estén por la afirmativa sírvanse a levantar...

–Paz: Vamos a poner una nota de cordura por favor porque sino esto…

–Giovannone: Señores concejales, pongo a votación la incorporación del dictamen.

–Paz: ¡¡¡Léalo!!!

–Castillo: ¡¡¡Un dictamen de comisión que viene con un reglamento nuevo: están avanzando sobre la Ley Orgánica Municipal!!!

–Giovannone otorga la lectura del dictamen y agrega: “Estamos hablando del dictamen que estaba en comisión”.

–Paz: ¿En qué comisión?

–Giovannone: Bueno, pero ahora incorporamos un dictamen que se elaboró en base al otro dictamen que había recién.

–Todos los concejales opositores: ¡¡¡Nooooooooooo!!!

–Paz: ¡¡¡No se puede!!! ¡¿Cómo va a hacer otro dictamen?!

–Giovannone: Si quiere vaya a la Suprema Corte, haga lo que quiera.

–Todos los concejales opositores: ¡¡¡Nooooooooo!!!!!!!

–Paz: ¡¡¡Hable con seriedad, mantengamos la cordura!!!

–Giovannone: “¿Pueden hacer silencio? Lea el dictamen (le ordena a la secretaria)”.

Finalmente, se dio lectura del proyecto que cambió el oficialismo y, lógicamente por mayoría, se incorporó al orden del día para su posterior aprobación. Aunque faltaba un duro debate, el cual será retratado en una segunda entrega.