Mario Secco a juicio oral acusado de coacción agravada e intimidación pública
Luego de que a fines del año pasado dos fiscales de La Plata, Ana Medina y Juan Cruz Condomí Alcorta, pidieron elevar a juicio la causa por "coacción agravada" contra el intendente de Ensenada, Mario Secco, por los incidentes ocurridos a fines de 2017 en la Legislatura bonaerense, el juez de Garantías, Federico Atencio, decidió dar curso a lo solicitado, informaron fuentes judiciales.
Secco está imputado por coacción agravada, intimidación pública y entorpecimiento de la labor legislativa, pero la defensa apelará la elevación a juicio y deberá definir la Cámara Penal.
Junto al intendente fueron enviados a juicio su hijo Nicolás Secco, Brian Yoel Taborda, Esteban Gonzalo Spivak, Luis Matías Emanuel Calcagno y Mario César Maza, por los delitos de “coacción agravada, resistencia a la autoridad y perturbación al ejercicio de funciones públicas”.
En tanto fueron sobreseídos Gerónimo Ángel Mareco, Marcos Ezequiel Martínez y Kevin Nicolás Toledo Spalleti que finalmente no fueron acusados por los fiscales quienes pidieron sean desvinculados de la investigación y el juez Atencio también compartió el criterio.
El incidente se produjo el 14 de diciembre de 2017, cuando Secco ingresó, junto con un grupo de militantes, al recinto de la cámara de Diputados bonaerense, en momentos en que se trataban los cambios en el régimen jubilatorio de los empleados del Banco Provincia.
El intendente aseguró que ingresó a la Legislatura por la fuerza (tras forzar una reja exterior) para denunciar la "represión" que había ocurrido afuera del recinto, durante una protesta contra la reforma jubilatoria.
A partir de los incidentes, la Justicia intervino de oficio e inició una causa por "coacción agravada" por lo que la defensa del intendente ensenadense pidió la eximición de prisión, medida que le fue rechazada en dos instancias.
El delito que se le imputa a Secco no es excarcelable. Sin embargo, los fiscales no solicitaron la prisión preventiva del procesado por considerar que no había riesgo de que en libertad entorpezca el proceso iniciado.
