En su exposición, el juez de faltas indicó que el recurso humano fue conformado netamente con personal municipal, lo que no generó inversión económica extra y que la actividad del juzgado, en tanto y en cuanto, sea acompañada por la estructura del Ejecutivo, puede generar ingresos.

“Es mentiroso que el derecho se presume conocido por todos, mucha gente no sabe que tiene derechos y para eso están los abogados”, comenzó diciendo Festa, destacando además la labor del juez Jorge Troncoso.

Anclado en la zona de La Franja, pero representando a toda la comunidad de Berisso, se dio apertura a este juzgado. “Vamos a establecer competencias durante todo el mes, quince días él y quince días yo”, explicó el entrevistado para dejar en concreto la incidencia y la posibilidad de descomprimir la carga del Juzgado 1.

“Yo tengo competencia exclusiva sobre defensa del consumidor. Y tengo ganas de charlar con Jorge con el fin de que se pueda generar competencia del Juzgado de Faltas 1 en otras cuestiones”, dijo y manifestó que ahora el Juzgado Número 2 tiene bastante trabajo.

Ejemplificó con el caso de una vecina que por 16 años pagó a ABSA el servicio de cloacas que nunca tuvo. La empresa ofreció devolverle 12 mil pesos en crédito de futuras facturas. En este plano, tomó intervención el juzgado comandado por Carlos Festa y hoy pelea por un resarcimiento en otros términos.

“Cuando el consumidor considera que algo es injusto, que venga y lo diga”, sea por cualquier empresa prestadora de servicio que “venga a reclamar”, alentó el juez Festa y reconoció el acompañamiento al consumidor.

“El juzgado es una herramienta, uno está tratando de difundir los derechos que tienen los usuarios, la ley es defensa al consumidor y el Juzgado de Faltas Número 2 es con competencia en este plano. Te convertís en voz de esos vecinos que tienen inconveniente, pero es fundamental y clave que el vecino venga a reclamar, no puede hacer nada si no hay un reclamo. Si el vecino reclama cortando una calle, ahí nos quedamos, a nadie le resolvieron el problema cortando una calle. Tenés un juzgado con competencia y el vecino debe hacer uso”, insistió en el aire de Cadena Radial NOVA.

En el desarrollo de la entrevista, hizo foco en que la OMIC es una oficina de carácter informativo, con dependencia municipal y siguiendo pautas que hacen a la defensa, informándolos, haciendo instancias de mediación.

El desafío para esta nueva estructura se representa en el “vení, establecé tu denuncia y poné la firma”, apelando al compromiso de los vecinos y el sostenimiento de los ciudadanos. “Si tuviésemos el cumplimento de la ley por todos los estamentos, desde el ciudadano hasta los gobernantes, tendríamos otro país, pero estamos siempre esquivando a la ley”, advirtió.

Para cerrar, Carlos Festa se animó a esbozar opiniones sobre cuestiones políticas que se dan en la actualidad. Aseguró no extrañar el Concejo Deliberante, reconoció la necesidad que tanto él como el Ejecutivo tenían de que dejara la banca y destacó también las dificultades que hoy tienen los vecinos para hacer frente al día a día.

“Me echaron del Concejo Deliberante, me echaron del partido que me puso y me sentí con más libertad. Ahora como juez trato de mantener una ecuanimidad, que si bien tengo dependencia económica del Ejecutivo no tengo dependencia funcional. Trato de mantener un criterio de independencia, de racionalidad y de responsabilidad”, aclaró.

“El ofrecimiento del Juzgado de Faltas fue para que deje la banca. Mi origen es radical pero aparecía en la lista de cambiemos propuesto por el PRO, después de la elección de 2017 se dieron circunstancias que me hicieron no estar de acuerdo. El 11 de diciembre asumió y el 18 voté en contra de la reforma previsional porque para mí era inconstitucional, eso ya marcó una diferencia”, expuso, dejando en evidencia la “obediencia debida” de los partidos políticos.