Judiciales y Policiales
Cuestiona al Tribunal de Trabajo N° 2

Un platense, víctima de la industria del juicio: dio una "changa" y ahora le exigen una indemnización millonaria

Juicio laboral millonario debe afrontar un vecino de San Carlos.

Héctor Raúl Pagola es un platense jubilado. Trabajó en el Instituto de la Vivienda y actualmente vive en San Carlos. En el 2006, le ofreció trabajo a un ex vecino suyo al estilo “changas” para cortar el pasto y emprolijar un terreno, pero su respuesta no fue solo con la realización del pedido sino que anexó una carta documento, que en ese entonces pasó desapercibida.

Ya en el 2013 se profundizaron los dolores de cabeza para el clan Pagola. Tras otra carta documento, "un abogado y un changarín me hicieron un juicio para sacarme plata”, dijo en declaraciones a NOVA. “La Corte me rechazó la apelación y hoy tengo que depositar 1.700.000 pesos más los intereses para damnificarlo", sintetizó.

“Es una locura total, estamos en manos de delincuentes, me enviaron a la quiebra directamente y por lo visto lo único que funciona es la industria del juicio. Hoy en día tengo una parálisis facial y la estoy pasando mal”, reconoció a este medio.

“No sirve esta organización de la justicia, fui castigado injustamente por un fallo mendaz y arbitrario proveniente de un juez del trabajo en la provincia de buenos aires que me ha condenado a la quiebra”, recalcó.

Y arremetió contra los jueces porque “solo la liviandad de un par de testigos falsos es suficiente asidero y prueba suficiente para sus más absurdas sentencias sesgadas por sus principios pro operario o pro amigo o pro coima y por supuesto la revisión por parte de la Corte solo es habilitada para los que tienen plata para depositar los más inverosímiles importes”.

Por último, disparó munición gruesa hacia la diputada Elisa Carrió por querer fomentar las "changas". “Quien va a dar "changas" si te agarra un juicio laboral y te parte al medio”, sentenció indignado.

“Hoy me toca a mí sufrir las consecuencias de este sistema judicial que no solo es corrompible, sino que además tiene la virtud de actuar como freno al despegue de las inversiones de emprendedores chicos y medianos, pues con solo una sentencia sin apelación, los condena al cierre y la liquidación de escasos patrimonios, construidos luego de muchos años de sacrificio”, reflexionó.

"No creo en la justicia de la provincia de Buenos Aires, o al menos no creo en las sentencias del Tribunal de Trabajo 2 de La Plata , una justicia que permite que abogados inescrupulosos, aleguen mentiras sin ningún tipo de responsabilidad ulterior y que simples changarines les sirvan de pretexto y justificación para seguir alimentando la industria del juicio. Y mientras tanto la Corte mira para otro lado...”, culminó.

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