El intendente que más cobra en Buenos Aires: Jorge Nedela y sus abultados aumentos de salario
Uno de los reclamos que siempre están en pie de discusión viene de la mano de los aumentos de sueldos, sobre todo cuando se trata de municipales o cooperativistas, quienes exigen mejoras salariales a lo largo del año, ya que en varios municipios de la provincia terminando el 2018 estaban con un mínimo de 8 mil pesos.
Pero al parecer, los que no tienen problemas de aumentarse los sueldos son ciertos intendentes del conurbano bonaerense, quienes aumentan su patrimonio sin que quede claro el cómo, el cuándo y a costa de qué, pero lo cierto es que no paran de crecer sus ingresos por el puesto que ocupan.
Berisso: el intendente Nedela tiene el sueldo más alto de la provincia https://t.co/yuji8Hwp9r
— Esteban Chacho (@estebchacho) 14 de enero de 2019
Llamativamente, el que percibe el sueldo más abultado es nada más y nada menos que el intendente de Berisso Jorge Nedela, quien declaró en 2017 un sueldo mensual neto de 205.064 pesos.
Por supuesto, otros mandamás que justamente pertenecen a Cambiemos, ya sea de la rama de la Unión Cívica Radical o del PRO, como Gustavo Posse de San Isidro o Nicolás Ducoté de Pilar, quienes en ese mismo año cobraban un poco menos de 200 mil pesos.
Cabe destacar que los salarios de los jefes comunales se rigen por la Ley Orgánica de las Municipalidades que estipula, en su artículo 125, que el haber mínimo debe ser equivalente a 10 sueldos de un empleado municipal del escalafón más bajo.
Esto último es lo que no termina de cuadrar, ya que como lo ha denunciado NOVA en varias oportunidades, los sueldos de los empleados municipales son bajos, en algunos casos no superan los 10 mil pesos, por lo que para cobrar más de 200 mil pesos, los intendentes deben dibujar los ingresos con viáticos y algunos gastos que no corresponden directamente con el sueldo neto.
En ese sentido, la mayoría de los intendentes recibe sumas extras mensuales bajo la figura de "gastos de representación" que pueden implicar un plus de hasta un 70 por ciento sobre los haberes iniciales y generalmente ese ingreso no es parte del salario, sino una compensación de gastos.
Lo cierto es que el que más se llena los bolsillos es Nedela, ya que estaría cobrando al menos 300 mil pesos, y queda en tela de juicio si realmente equivale a 10 sueldos de los empleados municipales más bajos, teniendo en cuenta los numerosos reclamos que el intendente no supo resolver cerrando en 2018.
