Política
Todavía no hubo solución

Sigue el conflicto por la escuela de box en Villa Elisa y acusan a la delegada de tener intereses ocultos

Gran parte del predio que pertenece a la delegación está descuidado, pero ahora lo necesitarían para hacer negocios inmobiliarios. (Fotos: NOVA)

Semanas atrás se desató un conflicto en ese barrio platense por la clausura que sufrieron en un galpón donde se dictaban clases de boxeo y otros deportes para contener a los jóvenes de la zona. Esta decisión tomada en conjunto por el municipio y la delegada comunal despertó el rechazo de los vecinos, que se movilizaron para impedir el cierre del complejo.

Por el momento, no se ha llegado a una solución pacífica y los cañones apuntan a al interés oculto que tendrían Virginia Pérez Cattáneo y el senador provincial de Cambiemos, Juan Pablo Allan. La intención que perseguirían ambos, y que contaría con el visto bueno de la comuna, es utilizar ese terreno para la instalación de un enorme negocio inmobiliario.

Actualmente, la escuela de boxeo “El Pava Carrizo” funciona en apenas una pequeña parte del predio total que pertenecía a la Organización Fabril Argentina (ex OFA) y que actualmente está bajo la dirección de la delegación de Villa Elisa que, a pesar de insistir con la apropiación de ese espacio, tan solo utiliza un galpón para guardar los camiones de las cooperativas.

Al mismo tiempo, la funcionaria y sus súbditos lo acusan a Oscar Alberto Carrizo, más conocido entre sus allegados como “Pava”, fundador del complejo de deportivo, de haber tomado las tierras que comenzó a utilizar en 2009 y que, un año después, el municipio tomó posición para que sea parte de la delegación.

Con el cambio de gestión, se acrecentó el interés del ejecutivo local por esas tierras con promesas que en más de dos años de gobierno nunca se cumplieron, que van desde la mudanza del centro de atención vecinal allí, hasta la construcción de un centro cívico, un polideportivo, un museo y una pileta comunitaria gigante, pero nada de eso se hizo realidad.

Por último, el malestar de los vecinos que día a día comparten momentos en la escuela de box fue creciendo y acusan a la delegada de tener intereses económicos ya que, según cuentan, semanas atrás una iglesia evangélica comenzó a construir en una parte del predio y Pérez Cattáneo no ha realizado ningún de presentación para frenar esa edificación.

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