Ante todo, los trabajadores precisaron lo que refiere al programa, que se creó en el año 2004 apuntando a fortalecer el primer nivel de atención y generar recurso humano para cubrir las necesidades la población. Se trata de una formación en servicio estructurado en un posgrado. El contrato comprende que luego de dos años de labor, mediante becas, los trabajadores debían pasar a planta permanente.

Hoy son más de cincuenta personas comprendidas en este programa trabajando de forma precarizada, con hasta trece años de antigüedad.

El pedido concreto de quienes ofrecen servicios en las unidades sanitarias es el pago en tiempo y forma de sus haberes (recién percibieron el salario del mes de junio), la actualización de los mismos (congelados desde hace dos años y medio) y el definitivo pase a planta permanente de la totalidad de trabajadores de la salud, además de la atención en materia de infraestructura y los vínculos humanos.

A todo esto se suma que Nación estableció un periodo de cinco años para ir progresivamente desfinanciando el programa, por lo que la continuidad de los trabajadores dependerá de la órbita municipal.

Sobre la política que el Gobienro comunal planea aplicar para esta situación, Augstaitis expuso que “hay que discutir y estamos discutiendo que hay que tratar que se generen los recursos para que el municipio mejore para dar respuesta. Esto es una cuestión meramente económica, no una decisión política”.

En este marco, Daniel manifestó que en el “mientras tanto” los trabajadores padecen. “Todos sabemos lo que aumentó todo y hay trabajadores médicos comunitarios que se sostienen solo con ese salario que quedó congelado desde hace dos años y medio, tomarse el micro, ir a comprar la leche no es lo mismo. Estamos sufriendo un desfinanciamiento desde 2016” y “lo importante es delimitar las responsabilidades y que cada uno asuma la suya. Vos tenés una historia como médico, pero hoy que estas en el lugar de funcionario es momento de poder construir y dar respuestas”, exhortó.

En este sentido, Augstaitis remarcó la apertura al diálogo insistiendo en que no es una cuestión de voluntades, sino de posibilidades reales económicas para responder por parte de Municipio.

Los trabajadores presentes aseguraron confiar en la buena predisposición del Secretario, en su optimismo pero manifestó que existe un compromiso firmado el 20 de diciembre pasado y desde esa fecha a la actualidad nada cambió. Hay que agregar que quienes están bajo este programa perciben entre 6 y 11 mil pesos mensuales por el servicio de suma necesidad que realizan para la atención primaria (representan un tercio de la estructura de la atención primaria y lo hacen sin contrato, sin seguro, entre otras precariedades).

El 45 por ciento de la población en la ciudad no tiene cobertura por lo que dependen exclusivamente de la atención del Estado indicó el secretario comunal y manifestó que en los últimos 30 años se atravesaron procesos de destrucción de este sistema sanitario.

“En dos años y medio no podemos revertir esto, donde hubo ausencia de políticas de salud”, lanzó el funcionario y recalcó que “tenemos que salir adelante y hay que mejorar la situación económica del municipio”.

“Mi compromiso es trata de priorizar salud en la gestión del gobierno, es importante que en los medios se instale el tema de salud pública, es un logro de esta gestión. Ahora hay que tratar de incorporar los temas de salud pública en la agenda política. Está el compromiso y hay que traducirlo en hechos. Jorge Nedela tiene el mismo compromiso, pero entre el querer y hacer hay dificultades”, admitió.

Este añom, el Municipio tiene un 20 por ciento de responsabilidad sobre el Programa Médicos Comunitarios, el próximo será el 40 por ciento y así paulatinamente “se va a hacer cargo y va a absorber en su planta a todos estos trabajadores médicos comunitarios. Sí, pasan a planta permanente pero cuando estén los recursos. Se tiene que ir incorporando gradualmente a todos los trabajadores”, se comprometió Augstaitis.

Como respuesta, Fernanda y Daniel, coincidieron: “hablarnos de esperanza, de fe y lo único que falta es que nos digan que tenemos que vivirlo con alegría. Me parece importante destacar que en algunos casos los compañeros tienen temor de manifestarse por sus propios derechos”.

Mientras, otros compañeros oyentes pidieron que no se tomen represalias ante las medidas de fuerza.

Cabe destacar que en el transcurso del debate el responsable de salud ratificó que “van a pasar a planta, esa es la certeza, no tengo la respuesta respecto al tiempo. Tenemos que dar respuestas económicas y yo no manejo los fondos del municipio, vamos a hacer una reunión para que esto se pueda ver también. Hay que reivindicar al trabajador de la salud pública y hay que espera”.

Es importante subrayar que Augstaitis manifestó que en la gestión anterior de la totalidad de pases a planta permanente (anunciando alrededor de 300) ninguno fue trabajador del Programa Médicos Comunitarios, y asumió también que en esta gestión tampoco se dio el pase de ningún trabajador.

“Es una cuestión de recursos, cuando estén disponibles la prioridad lo tienen los médicos comunitarios. En dos años y medio de gestión no hemos nombrado trabajadores nuevos en salud y cuando nombremos serán comunitarios. No nombré 300 trabajadores. El compromiso que tengo es que cuando incorporemos van a salir de este programa”, cerró.