Piden elevar a juicio la causa por la muerte de un preso en Olmos
El Fiscal Marcelo Romero pidió la elevación a juicio de la causa en la que se investiga la muerte de un detenido del penal de Olmos, ocurrido el 1 de agosto de 2016, por lo que hay nueve penitenciarios imputados por torturas y homicidio.
Según trascendió, aquella mañana de inicio del mes de agosto, uno de los internos alojados en la Unidad 1 de Olmos sufrió un ataque de epilepsia y un posible brote psicótico. A partir de allí, sus compañeros de pabellón intentaron trasladarlo hacia sanidad, dado que la médica de guardia se resistía a ingresar al penal.
Ya durante el traslado, el preso sufrió una nueva descompensación y comenzó a resistirse mediante golpes de puño y forcejeos descontrolados. A raíz de ello, intervino un grupo de agentes de la guardia penitenciaria, que redujo al interno a la espera de que baje la médica que, según algunos testigos, se encontraba desayunando.
Luego de varios minutos, los agentes penitenciarios decidieron trasladar al detenido hacia sanidad, donde el detenido llegó agonizando o sin vida. Según la autopsia, la muerte se produjo por asfixia.
De esta manera, con el panorama del fallecido, César Albarracín, abogado defensor del Jefe del Penal, Rafael Herrera, adelantó que pedirá que el juicio se haga por jurados.
El letrado señaló que “la prueba científica descarta que Herrera y sus dos subjefes puedan haber asfixiado al interno porque salió con vida de la oficina del jefe de penal y murió varios minutos después, lapso en el que se mantuvo consiente, respirando, gritando y resistiendo el accionar de los guardias.
Durante la investigación, hubo fuertes críticas de los defensores al funcionamiento del sector sanidad, porque –al momento del hecho- había más de 70 detenidos epilépticos en el Penal de Olmos, todos sin tratamiento ni medicación. De hecho, la víctima había padecido, al menos, dos ataques epilépticos previos en las semanas anteriores.
Asimismo, Albarracín sostuvo que “se encuentra seriamente cuestionado que haya existido un homicidio doloso por parte de los agentes penitenciarios, porque está acreditado que ninguno tenía motivos para querer matarlo y que intervinieron con el fin de que la médica baje a atenderlo, cosa que se demoró en forma inexplicable”.
Con la elevación a juicio, el Fiscal Romero dispuso también la formación de causa por separado contra la médica.
