Astillero Río Santiago: trabajadores tomaron las oficinas de Dirección, ante un nuevo desprecio por parte del Gobierno
Durante la jornada de este lunes, un tenso clima se vivió en el Astillero Río Santiago: la Comisión Administrativa de ATE Ensenada se dirigió a las oficinas de Dirección de la empresa y se manifestaron en las adyacencias del lugar, esperando ser atendidos por quienes manejan los hilos de la fábrica naval. Los trabajadores esperan explicaciones luego de las declaraciones vertidas por el presidente de la Nación, Mauricio Macri quien el día viernes en Mar del Plata, ante los familiares de los tripulantes de los barcos hundidos manifestó que "el empresario Vito Contessi dijo que al Astillero Río Santiago hay que dinamitarlo".
Según expresaron en diálogo con NOVA, los trabajadores nucleados en ATE aseguraron que “estas declaraciones de inusitada violencia generan apología de delito”. De este modo, los empleados se encuentran en alerta, concentrados a la expectativa para analizar medidas de fuerza a seguir.
Decididamente, la metida de pata de Macri fue la gota que rebalsó el vaso: “Nos hace reafirmar que no sólo el gobierno le ha dado la espalda al ARS y a toda la industria naval, sino que también lo pretende desprestigiar públicamente”, expresaron. Asimismo, expresaron que es vergonzoso y genera un profundo rechazo que un presidente argentino replique semejante frase, teniendo en cuenta su cargo y embestidura.
Francisco “Pancho” Banegas, Secretario General de ATE Ensenada señaló que "lamentablemente, y a pesar de múltiples gestiones, reuniones y proyectos encarados por esta organización gremial, Mauricio Macri aun no comprende o quizás prefiere ignorar la importancia estratégica para el país que representa el ARS, cuyos trabajadores daremos la vida por defenderlo.
Cambio de capitán, no de rumbo
Desde hace meses, trabajadores del Astillero Río Santiago vienen tocando puertas por doquier para que su reclamo sea atendido: “Inversión ya para reactivar la producción naval”. Sin embargo, la principal destinataria del mensaje, María Eugenia Vidal, sigue mirando para otro lado, dándoles la espalda a 4 mil familias. Inclusive, en una visita de la gobernadora a la Planta Potabilizadora de Absa en Punta Lara, un grupo de trabajadores se acercó para entregarle un petitorio y ni siquiera se los recibió.
Con 3 años de gestión, Cambiemos no ha adoptado ninguna política en relación al Astillero, ha dejado el barco a la deriva, con los capitanes atados de pies y manos por la falta de inversión: el primero en presidir el ARS desde el cambio de Gobierno fue Ernesto Gaspari (hombre ligado directamente al presidente Mauricio Macri, ex CEO de Musimundo e integrante de Socma S.A.), en segundo lugar Gabriel Curto (abogado y empresario que responde al actual ministro de Producción bonaerense, Javier Tizado); ahora el timón se lo dieron a Daniel Capdevila, hasta entonces coordinador de proyectos del Ministerio de Infraestructura.
La primera medida de la actual Intervención había sido echar a siete gerentes de carrera: Daniel Romano, Ruben Ferreri, Gustavo Silva, Roberto Jaimes, Adrián Borcerio, María Rosa Maduri y Carlos José Maduri. Entre los empleados reflotó el fantasma del recorte, por aun no hay precisiones: reina la incertidumbre y el sindicato adoptó un estado de alerta.
Vidal y un concejal Pro de Ensenada también criticaron al ARS
En medio de un debate, Gustavo “Cubito” Asnaghi, concejal electo y referente de Cambiemos en Ensenada, disparó una frase que causó mucho malestar en su ciudad: “El sueldo de los trabajadores de Astillero es excesivo”. Quien alguna vez coqueteó con ser el Director del ARS, desoyó el reclamo obrero y decidió poner en cuestionamiento el salario de sus empleados.
Al candidato del PRO, al que muchos no le conocían la voz, se le corrió el maquillaje cuando habló del Astillero: quiso justificar la deuda que la Provincia tiene con Ensenada pero se le salió la chaveta y terminó acusando a los trabajadores de cobrar sueldos abultados.
Este traspié se suma a lo que dijo tiempo atrás, en un programa televisivo, la gobernadora María Eugenia Vidal, afirmando que el predio naval es la única empresa del Estado bonaerense que no es productiva. En esa línea, a pesar del pedido de reactivación de los trabajadores, Cambiemos anunció la adquisición de 5 lanchas-patrullas israelíes en 49 millones de dólares y 4 buques de guerra franceses en desuso por 300 millones de euros: desde los tallares navales en Ensenada afirmaron que esas embarcaciones podrían fabricarse con trabajo nacional y a mitad de precio.
