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Retrato de un burócrata millonario: Carlos Quintana, de UPCN, cobra un sueldo superior a los 200 mil pesos

Carlos Quintana, secretario general de UPCN, no se parece en nada a un trabajador. (Foto: Archivo NOVA)

Los empleados públicos afiliados a la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) participaron el pasado jueves 31 de mayo del proceso eleccionario que se llevó a cabo en su sindicato. Sin ninguna alternativa electoral, Carlos Quintana fue reelecto como Secretario General.

Las autoridades del gremio vienen acumulando una serie de denuncias por graves irregularidades. La historia de excesos y gastos insólitos de Quintana no es ninguna novedad. Fue sorprendido escapando en helicóptero con 30 mil dólares, aseguró haber ganado el Loto en un día en el que no se sorteó nada y está involucrado en una causa por defraudación en IOMA por algo más de 3 mil millones de pesos.

Ahora, según develó una investigación de REALPOLITIK, los ojos se posan sobre el salario del siempre polémico líder de UPCN. Solo en el mes de enero de este año, el representante de los trabajadores cobró un sueldo superior a los 200 mil pesos.

Aunque suene extraño, Quintana tiene dos ingresos. Uno se desprende de su trabajo como secretario General de UPCN bonaerense. Otro, aparentemente, como parte de las labores que realiza para la sede nacional del gremio y su mutual, por cuyo esfuerzo percibe la nada despreciable suma de 38.125 pesos extras.

Como si esto fuera poco, el vínculo de Quintana con la AFIP no pasa por su mejor momento: fue suspendido por este organismo fiscal. Al parecer, la condición de “irregular” surge de la no presentación de declaraciones juradas.

El que se sumó recientemente a este grotesco espectáculo fue Héctor Nieves, secretario de Finanzas de la seccional bonaerense de UPCN, quien cobra un sueldo de 10.963 pesos en el Senado y factura 53 mil pesos mensuales como monotributista.

El reconocido sindicalista de las cadenas de oro accedió a la compra del palco 322 de la cancha de 1 y 57 de Estudiantes de La Plata, valuado en 174 mil dólares, unos 4.3 millones de pesos. El dinero no salió de su bolsillo, sino de la caja de cuatro empresas vinculadas a UPCN: Promotora Social Vida SA, Social Promotora SA, Credymand SA y Cinco Her SRL.

Amante de los autos ostentosos, decidió redoblar la apuesta y, en un ejercicio de magia administrativa y financiera sin igual, decidió comprarse un BMW X3 (patente AA998PU) y un Hyundai Genesis coupé 3.8 (patente PDI 463). Los dirigentes de UPCN que se erige como ejemplo de los gremialistas, una vez más, no pueden justificar su patrimonio.

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