El tema fue expuesto por el titular del bloque Unidad Ciudadana Gastón Castagneto, quien denunció la “falta de acompañamiento del Estado municipal” a las agriculturas familiares de la periferia de la ciudad, que sufrieron los estragos por la intensidad de las últimas lluvias.

Después de describir la conflictiva realidad pos temporal de las familias y productores, Castagneto pidió que se declare la “emergencia” en el rubro y “se liberen 10 millones de pesos” para paliar la situación. La propuesta fue derivada a comisiones de Desarrollo, Legislación y Hacienda pero encendió un extenso debate.

Se sumó, desde el mismo bloque, Victoria Tolosa Paz: “El Ejecutivo debería tomar cartas en el asnto para solucionar los problemas del cinturón productivo, que viene siendo azotado por las últimas tormentas. Es preocupante ver el poco despliegue del Estado municipal, que tiene una incapacidad operativa evidente”, disparó. “Tardaron más de diez días para entregar ocho chapas”, remató.

Desde el oficialismo, el edil Darío Musto –que había sido mencionado como “presente” en las recorridas barriales por Paz- salió en defensa del trabajo realizado por la comuna. “Yo atendí a una familia puntual con las chapas y desde Desarrollo Social se están realizando relevamientos”, dijo.

Después de otra intervención a los gritos de la edil kirchnerista, se sumó el radical Guillermo Ronga, que habitualmente no participa en los debates. “Es faltar a la verdad decir que el estado municipal y el provincial no se ocupan de los problemas. Hay un desconocimiento total, ya que fueron casi 300 los productores afectados y se está trabajando desde la secretaría de Producción”, completó.

Julieta Quintero, concejal Pro, reforzó la postura de Cambiemos y le recordó a los peronistas las falencias que tuvo el gobierno del ex intendente Pablo Bruera durante la trágica inundación de abril del 2013. “Es bajo hacer política con este tema”, acusó.

Otro de los ediles novatos también habló: “Hablan con un grado de desconocimiento muy grande. Se refieren de cualquier manera sobre cualquier punto que se trate”, cuestionó Raúl Abraham. “La ciudad tiene un problema estructural de vivienda y lo vienen a descubrir ahora” completó.

Antes de que vuelvan a intervenir los ediles de extracción peronista, el massista Luciano Sanguinetti puso un poco desentido común. “Le quiero preguntar al oficialismo si puede dar información concreta de cómo actuó ante la situación y cuál fue la ayuda social concreta para las familias y los productores”, inquirió. “Hablemos con información, porque si no todo queda en un intercambio de opiniones”, concluyó.

La edil Lorena Riesgo fue más práctica y propuso que se apruebe una ordenanza creando un programa de asistencia específica para fenómenos climáticos. “Busquemos soluciones concretas para problemas que sabemos que son parte de la realidad y aparecen cada dos o tres meses”, justificó, para pedir un “fondo específico de asistencia” que sea ejecutado antes eventualidades climáticas severas. “Tenemos que planificar para no tener que improvisar después” dijo.

El macrista Julio Irurueta se sumó al debate ponderando “la actitud propositiva” de Lorena Riesgo y la comparó con “el discurso de barricada de concejales de otros bloques” refiriéndose al cristinismo. Después se cruzó con Castagneto por el monto de dinero que el concejal de UC había sugerido destinar. “Es insuficiente, ignora el tema”, lo chicaneó. Sanguinetti volvió a hablar para calificarlo de “sádico” y antes de que termine el debate el ex “lilito” Javier Mor Roig cuestionó la postura de la oposición de hablar de “un estado que no existe”.

Sobre el cierre de la discusión, el edil Norberto “Chucho” Gómez (UC) reflotó las polémicas declaraciones de la diputada provincial macrista Carolina Piparo, que había ponderado “las bondades” de tener que acudir un comedor comunitario, experiencia a la que insólitamente comparó con alimentarse en un restaurante.

Otros temas

En un sumario que superó los 80 expedientes, se abordaron otras problemáticas de interés regional. La concejal radical Florencia Rollié cuestionó nuevamente al Ejecutivo. Esta vez lo hizo en relación a la nocturnidad y pidió información sobre las actas de clausura de boliches platenses que fueron cerrados en un promocionado operativo de seguridad municipal pero sugestivamente reabrieron en menos de 10 días. Mencionó, entre otros, a los bares Hogan, Praga, Warning y Almendra.

Además, con la nutrida presencia de taxistas de la ciudad, se abordó la imposición de multas de hasta 173 mil pesos para quienes practiquen el transporte ilegal –específicamente el caso de los UBER-.

Finalmente, Riesgo pidió información sobre la situación de precariedad laboral en la que los trabajadores -en su mayoría jóvenes- de la firma Glovo reparten correspondencia en el ámbito local.

Al inicio de la sesión, se había aprobado la ampliación de la construcción del Jardín Maternal n°14 de Villa Elisa, contemplado en el Anexo de la licitación n° 40 del 2012.