Astillero parado: con la actual gestión, el único barco que ingresó a las gradas fue el de la "Repu"
A los pocos días de asumir, Ernesto Gaspari, el hombre asignado por Cambiemos para dirigir el Astillero Río Santiago (ARS), recibió a la prensa en su despacho y dejó en claro su objetivo era reactivar la producción naval, dándole prioridad a la entrega inmediata de los dos buques encargados por Venezuela; también resaltó la necesidad de encarar la construcción de nuevas embarcaciones. Sin embargo, nada de eso ocurrió: no se cumplió con el plazo de entrega que detalló y lo único que ingresó a las gradas fue el barquito de la República de los Niños, algo insólito.
Siguiendo la línea de Cambiemos, Gaspari, empresario porteño muy allegado al presidente Mauricio Macri (fue director de finanzas y gestión de SOCMA -Sociedad Macri-), sigue insistiendo en la idea de “productividad”, pero los trabajadores del ARS aseguraron que la empresa estatal está siendo abandonada por la gobernadora María Eugenia Vidal.
Adrián Espósito, candidato a segundo concejal por Unidad Ciudadana en Ensenada, ciudad donde está emplazado el Astillero, visitó el lugar junto a algunos de sus compañeros para conocer la realidad desde adentro: “Nos encontramos con los trabajadores en estado de alerta, muy preocupados por el futuro del ARS, porque no entran barcos a las gradas y esa es su fuente laboral”, explicó en diálogo con NOVA.
Asimismo, Espósito denunció un ninguneo por parte del Gobierno Nacional anunciando la adquisición de 5 lanchas-patrullas israelíes en 49 millones de dólares y 4 buques de guerra franceses en desuso por 300 millones de euros: “Desde los tallares navales en Ensenada afirmaron que esas embarcaciones podrían fabricarse con trabajo nacional y a mitad de precio, no entendemos qué es lo que pretende Cambiemos”.
En una mesa que montó ATE en el centro de Ensenada, Facundo Gómez, de la Junta Interna en el ARS, expresó: “Solo estamos haciendo reparaciones de embarcaciones y continuamos con trabajos de la gestión anterior, pero nos están desabasteciendo y se complica seguir con las tareas”.
En esa línea, denunció que uno de sus compañeros perdió la vida por la falta de inversión en seguridad: “Trabajamos con máquinas de 30 años de antigüedad y nos ponen muchas trabas para adquirir herramientas y material, nos tratan como a un ministerio cuando somos una empresa de producción”.
Por su parte, Nahuel Díaz Galli, delegado de ATE Ensenada, sobre la compra de buques en el exterior, reconoció que “generó un descontento muy grande la decisión del Gobierno, esas construcciones se pueden hacer tranquilamente en nuestro Astillero, las dimensiones nos lo permiten”.
Gaspari no cumplió con su palabra
En relación a los buques venezolanos, trabajo gestionado y generado por el Gobierno anterior, Gaspari había afirmado que el buque “Eva Perón” iba a salir a prueba de mar el 15 de enero del 2017 y se entregaría en marzo del mismo año. Ya es agosto y los trabajadores del Astillero aseguraron que está muy lejos de la botadura, debido a la falta de maquinarias e insumos.
Hace un año y medio atrás, el empresario porteño había anunciado que el “Juana Azurduy” (el otro buque en cuestión), se iba a entregar en 18 meses. A días de que se cumpla ese plazo, la embarcación sigue en las gradas: “Tenemos miedo de que cuando terminemos estos barcos, el Astillero cierre y Vidal nos deje a todos en la calle, somos más de 3400 trabajadores”, concluyó uno de los gremialistas.
