Puestero de la Terminal de micros, encadenado tras ser desalojado sin orden judicial
La Terminal de Ómnibus se vio convulsionada durante la jornada de este viernes, en donde un trabajador que contaba con un puesto de venta de ropa, se encadenó como señal de protesta, luego de que sea desalojado por empleados del municipio platense hace 10 días, sin orden judicial y con malos tratos por parte de la policía local, según indicaron los damnificados
En diálogo con NOVA, el manifestante dentro del hall de la Terminal de Ómnibus, Rito Gamarra, afirmó que está ahí "porque vinieron hace 11 días desde la municipalidad, vinieron con más de 15 personas con bolsas de residuos en mano y cargando todo lo que había en el lugar y sin ninguna orden de nadie y me sacaron todas las cosas”.
"Yo tenía un puesto acá, vendíamos cosas de invierno: gorros, bufandas, guantes, medias, y vinieron del municipio, estaba mi hermana sola y me llama diciendo que le estaban sacando todo. Entonces le dije que se encierre y no le dejes sacar de adentro. Ahí la empujaron y le dijeron que se tenían que llevar todo. Ella se asustó y cuando llego se estaba llevando una bolsa y le digo qué haces me estas robando. Me meto adentro y forcejeo con la Policía que me empuja y me corto, tengo 4 puntos en la mano, y le digo si estaba a cargo de esto y me respondió que había una orden judicial" que nunca le mostraron.
Además: "En ningún momento hicieron un acta, anotaron lo que se llevaron, fue un atropello lo que nos hicieron. Para mí fue un robo que no me esperaba, de última que hagan las cosas bien. Esto es lo único que tengo, con esto alimento a mis hijos, con esto me mantengo yo".
En cuanto al tiempo que llevada en ese rubro, afirmó que “siempre fui vendedor ambulante, lo mío fue cuando estaba en la gestión de Julio Alak me dieron un puesto en 38 y 120, de ahí cuando asumen los Bruera me sacan y me dan un lugar acá en la Terminal. Yo no estoy acá hace dos días, hace 9 años que estoy y creo que me merezco, por lo menos, que me digan a ver cómo y dónde podemos ponerlo, en algún lugar para trabajar”.
Reflexionando, Gamarra insistió: “Yo qué hago, que me diga Julio Garro lo que tengo que hacer, salir a robar nunca lo hice y ni lo voy a hacer. Eso es lo que fui a arreglar con el municipio que nunca me quiso atender. Hace un año que fuimos reprimidos el 8 de enero y era una de las cosas que tenemos que hablar para pagar un canon. Si a mí me dicen tenes que ponerte allá y pagar, yo no tengo problema. Lo que pasa que esto es todo de amigos entre ellos, te quieren sacar y no te dan ni una chance de seguir trabajando".
Ante la consulta si dialogaron con alguna autoridad, "El martes se acercó el subsecretario de Seguridad, Fernando Padován, hablamos y le explique cómo era esto, y me pidió que bajemos los carteles para empezar a negociar". Y sobre las cosas que se llevaron, me dijo: "quédate tranquilo que te las vamos a devolver". E indicó que "si están las cosas, me van a devolver la mitad".
