Requisas en colectivos: lejos de brindar seguridad a los trabajadores, responde a un capricho de Gar
La inseguridad se le fue de las manos a Cambiemos y La Plata se convirtió en uno de los epicentros del delito. Tratando de despejarla a la tribuna, días atrás, el intendente Julio Garro manifestó que los delincuentes, en su mayoría, venían de Ensenada y Berazategui, lo que ocasionó una fuerte polémica. Ahora, la Provincia bajó la orden de llevar adelante operativos policiales en el transporte público de toda la Región.
Las críticas no tardaron en llegar y la contra respuesta inmediata de la gestión de María Eugenia Vidal giró en torno a la protección de los colectiveros, tras una serie de ataques que sufrieron los trabajadores. Sin embargo, los reclamos de mayor fuerza vinieron de trabajadores de la Zona Oeste bonaerense, luego del asesinato de Carlos Sánchez (42) de un disparo en la cara cerca de la estación de Claypole, en el partido de Almirante Brown; y las requisas se están efectivizando solo en las ciudades de La Plata, Berisso, Ensenada, Berazategui y Quilmes, respondiendo más a un pedido del jefe comunal platense.
Principalmente, los controles están instalados en los accesos y salidas a la Ciudad: “Detuvieron al colectivo de la Línea 275, nos hicieron bajar solo a los hombres, nos palparon y pidieron DNI”, aseguró un vecino de Ensenada en diálogo con NOVA. Lo mismo relató una muchacha en la Línea 202.
Esta medida sorprendió a los pasajeros de la Región y provocó una polémica entre los que están a favor de la iniciativa porque creen que puede ayudar a contrarrestar el delito en la vía pública y los que se oponen porque les recuerda épocas en las que las “razzias” constituían un avance contra los derechos individuales.
Planteada la controversia, desde el ministerio de Seguridad de la Provincia sostuvieron que los operativos en los que se pide alguna identificación son “una medida preventiva” y que no se realizaron detenciones por carecer de la documentación requerida. El propio titular de esa cartera, Cristian Ritondo, aseguró que los controles seguirán hasta que se instalen las cámaras de seguridad en los micros, compromiso asumido con los choferes por la seguidilla de asaltos.
Como se recordará, en las últimas semanas se registraron distintos hechos de inseguridad que afectaron a choferes del Conurbano -incluso uno fue asesinado a balazos-, por lo se comunicó que los procedimientos se instrumentan como una manera de prevenir el delito. Participan tanto agentes de la Bonaerense como de la Policía Local.
Según números oficiales, la gran parte de delitos se cometen en motos y, en segundo lugar, en autos. ¿Por qué decidieron controlar a los colectivos públicos y palpar a los pasajeros si no hay una situación irregular que lo justifique?
