La ampliación de la ruta provincial 215 desde la intersección con la ruta 6 hasta el barrio Los Bosquecitos (en su primera etapa, contemplándose una segunda hasta el acceso a Brandsen) es una obra largamente solicitada por quienes transitan cotidianamente dicha cinta asfáltica, la cual sigue siendo escenario de graves accidentes, algunos de ellos en los que se tienen que lamentar víctimas fatales.

De los anuncios a los desligues

En 2009, el anuncio de la realización de esta segunda calzada tuvo su cara visible en la figura el entonces ministro de Economía bonaerense Alejandro Arlía, quien, buscando demostrar los contrastes en cuando a capacidad de gestión entre el radicalismo (en ese entonces al frente del Municipio) y el peronismo a cargo de Provincia, se reunió con vecinos y ediles para anunciar esta obra asegurando que el pueblo de Brandsen “tiene un gobierno provincial que resuelve sus problemas”.

Sin embargo, ya con el peronismo en el Municipio, los problemas y accidentes en la ruta 215 persisten. Lo que no se mantuvo fue el discurso de Arlía, quien, del anuncio, pasó a las justificaciones para desembarcar en la evasión de responsabilidades. Ahora, aclara que la obra le corresponde a Nación.

Con la misma tesitura se plantaron los concejales oficialistas en el deliberativo brandseño al momento de presentarse desde el massismo en la última sesión un proyecto de Resolución requiriendo al Ministerio de Infraestructura bonaerense (a cargo de Arlía) informes sobre la ejecución de la ampliación de ruta 215.

“El bloque del Frente Renovador pide al Ministerio de Infraestructura de la provincia. Tendríamos que dirigirnos a quien está financiando esta obra y quienes son los responsables. Esta obra fue acordada con Vialidad Nacional”, deslizó el portavoz del oficialismo municipal y funcionario provincial, José González.

Preocupación

Previamente, el jefe de bancada massista, Marcelo Giovannone, había fundamentado el pedido focalizando en el hecho de que “esta ruta sigue dejando gente en el camino con distintos accidentes”, recalcando que la obra “se ha venido atrasando y me gustaría saber cuáles son las razones”.

Y añadió: “Si nos podemos de acuerdo todos los bloques se podría sugerir con un poco más de fuerza, a través de una Resolución, qué pasa que tarda tanto este tramo y el otro (desde Los Bosquecitos hasta el ingreso a Brandsen), que sea un buen ensanche, y pedir, a través de una Resolución también, el tema del by pass para sacar la circulación de camiones”.

Respecto a esto último, vale señalar que el denominado “by pass” es una contemplada vía alternativa que se desprende de la ruta 215 a la altura de Los Bosquecitos y que tiene como objetivo evitar el cargado tránsito de camiones por el tramo de la mencionada ruta que atraviesa el casco urbano brandseño. En este sentido, Giovannone subrayó que, en un diálogo reciente con bomberos, le señalaron que algunos camiones con carga de la peligrosa sustancia metanol siguen cruzando (sobre todo en horas de la noche) la ciudad a pesar de que se ha diseñado otra hoja de ruta para este tipo de transportes.

Pateando la pelota a Nación

Por su parte, el concejal José González insistió en que la solicitud “no va a tener un destino feliz porque lo estamos mandando a un Ministerio que realmente no tiene competencia con la obra en sí”, recalcando que en la segunda etapa está contemplado el by pass y los seis kilómetros que restan de Los Bosquecitos hasta el ingreso a la ciudad, para los cuales “ya están hechas las expropiaciones”.

Asimismo, señaló que la obra no avanza como pretendían por diferencias de certificados que ya “se arreglaron”, por lo que “empezaron los primeros movimientos” y adelantó que su bloque no acompañaría el proyecto porque “hay que dirigirlo a Vialidad Nacional que es el organismo encargado de la obra”.

Ante esta postura, el jefe del bloque radical, Daniel Cappelletti, replicó: “Toda esta cuestión no le quita responsabilidad” a Infraestructura bonaerense porque “es provincia de Buenos Aires y es una ruta provincial”, aseverando que cualquier inconveniente de no finalización “es responsabilidad” de Provincia. Al mismo tiempo, pidió poner en valor el pedido por el by pass y “empezar a gestionar seriamente la finalización de esta obra”.

El agradecimiento de CFK

Por su parte, el concejal radical Ramiro Alcuáz recalcó que “la obra tiene por lo menos 5 años” y contó una peculiar anécdota de un acto encabezado por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en 2010 y al cual asistió como secretario de Gobierno municipal.

Allí, Alcuáz relató que en ese momento le entregó en mano a CFK “la carpeta con un montón de estudios y notas firmadas por la intendente, solicitándole que la obra desde Los Bosquecitos llegue hasta Brandsen y recuerdo que de mi mano la señora presidenta toma la carpeta, le expliqué en dos renglones de qué se trataba, y me dijo, textuales palabras: ‘Le agradezco mucho en nombre de mi madre y mi hermana’. Esto fue en 2010 y ya se estaba gestionando el segundo tramo”.

Vale señalar que la hermana de la presidenta, Giselle Fernández, reside en Los Bosquecitos, barrio hasta donde se extiende actualmente la obra, algo que supo disparar varias conjeturas en torno de la misma.

Las expropiaciones no están hechas

Por su parte, el presidente del Concejo, Raúl Paz (UCR), recordó que el Cuerpo emitió tiempo atrás una Resolución, de su autoría, donde observaban que “estratégicamente era más importante la concreción del by pass que la llegada a Brandsen”. Al mismo tiempo, le retrucó a González: “no están las expropiaciones hechas todavía, se han iniciado los trámites”.

Advirtiendo que “parece que va a ser más rápido la llegada a Brandsen de la ampliación (desde Bosquecitos hasta el ingreso a la ciudad) que el by pass”, Paz lo juzgó como “un error estratégico, porque vamos a meter al pueblo una cantidad de camiones. Debería ser al revés, y el Concejo debería fijar una postura”.

Desde el bloque radical, el concejal Antonio Marra (h) subrayó que “el poder de control siempre lo tiene el Gobierno de la provincia”. Y agregó: “Tenemos la autodeterminación de manejar nuestra propia obra pública, sino, nos va a pasar que la provincia de Buenos Aires nos va a entrar a hacer obra pública en el territorio de nuestro distrito y tampoco vamos a poder opinar al respecto”.

Cerrando el tema, el concejal Giovannone apuntó contra la postura oficialista: “Pareciera que tendríamos que pedir permiso para poner una resolución y ver si no afectamos algún logro, porque empezamos con las mezquindades”. Y le enrostró a González: “Por ahí se compromete porque trabaja en la Provincia, pero, más allá de eso, es concejal de Brandsen y tiene representatividad para con la comunidad y esta es una necesidad imperiosa de la comunidad”.

Al mostrar Giovannone apertura para incluir en la Resolución el requerimiento a Nación y así lograr que el bloque oficial adhiera, tras un cuarto intermedio para dicha modificación, finalmente el proyecto se aprobó por unanimidad. Ahora resta saber, además de la respuesta de Nación, si el ministro Arlía se hace cargo de sus “méritos” en la no conclusión de las obras con el énfasis que anunciaba las mismas hace ya casi seis largos años.