Tras el macabro hallazgo durante el allanamiento de la Morgue policial, testigo denunció amenazas
Soledad Escobar quedó perpleja luego de lo que observó el viernes pasado en la morgue policial del Cementerio de La Plata: entre los cuerpos de bebés habían cadáveres de perros, muertos que faltaban, otros que sobraban y un panorama tétrico, peor que al de una guerra. Pero eso no fue lo único horroroso que se llevó de la visita, también una amenaza de muerte.
Este miércoles a la mañana se acercó a Tribunales para denunciar ante la fiscalía de turno lo que sufrió en las últimas horas: recibió un mensaje privado por Facebook informando que “matan” a un familiar suyo en la ciudad de Mar del Plata. Preocupada, se comunicó con los suyos y afortunadamente nada de ello había ocurrido.
A raíz de las irregularidades que surgieron en el cementerio platense a partir de la trágica inundación que azotó a la ciudad el 2 de abril pasado, Gendarmería nacional se había trasladado hacia la morgue policial para peritar los cuerpos que se encontraban en ese lugar a partir de una orden judicial.
Se trata del segundo allanamiento en el marco de la investigación que realiza el Juzgado Contencioso Administrativo Número 1 de La Plata, a cargo del juez Luis Arias, quien elevó el pedido a la cartera de Seguridad.
Justamente, Escobar es la amicus curiae del Juzgado a cargo de Arias y participó del allanamiento. La denunciante afirmó en diálogo con NOVA que el Jefe de la Morgue de la policía provincial, el comisario Rosales, filmó y fotografió tanto a ella como a los otros testigos, en actitud intimidatoria.
“Fui amenazada por gente de Pablo Bruera el 29 de octubre, pero no me asustaban tanto. Pero ahora hablamos de la policía bonaerense y eso me genera más temor, pero eso no nos detiene para seguir luchando para esclarecer lo que sucedió el 2 de abril”, agregó la mujer a este portal. A días de cumplirse un año de las trágicas inundaciones, la cantidad de víctimas fatales sigue siendo una de las dudas más grandes de la investigación.
También informó sobre la notable negligencia que se advirtió en el espacio de la morgue, cuyas cámaras frigoríficas no funcionarían correctamente: “Detectamos mecanismos que se usan en democracia con los fines de ocultar cuerpos, identidades de personas”.
Otros testigos la acompañaron al Poder Judicial y reconocieron que lo que observaron fue desgarrador: “Ni los nazis eran tan desprolijos, nosotros tuvimos que comprar lavandina y Gendarmería tuvo que aportar más bolsas porque no alcanzaban para los bultos”.
Escobar manifestó finalmente que se contactó con ella gente de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH): “Ya es hora que los organismos de derechos humanos se presenten, porque son los principales interesados en lo que se descubre, es su función”.